El secretario general de Transición Social y Agenda 2030 del Gobierno Vasco, Jonan Fernández, ha advertido de que el «desequilibrio demográfico» que se padece en toda Europa es «particularmente subrayado en Euskadi».
En una entrevista a Radio Euskadi, recogida por Europa Press, Fernández ha valorado además la 'Estrategia Vasca 2030 para el Reto Demográfico' que incluye «un conjunto de medidas que tienen como objetivo orientar una respuesta al problema de la crisis demográfica».
Tras reconocer que se da una situación de desequilibrio demográfico, Fernández ha incidido en que la sociedad está envejeciendo y las tasas de natalidad son muy bajas. «Es un fenómeno que atañe a toda Europa pero es particularmente subrayado en el caso de Italia, España y Euskadi», ha alertado.
Según ha concretado, en 2022 la edad media de la población vasca ha sido de 45,5 años mientras que en 2014 era de 44,8, lo que significa que «cada vez somos menos y más mayores».
Además, ha recordado que el desequilibrio demográfico tiene afecciones en ámbitos como «la reposición de la mano de obra, el sostenimiento de las políticas sociales, el mantenimiento de las aulas escolares o el tensionamiento del sistema de salud».
A su juicio, el origen de este desequilibrio estaría en factores culturales y materiales. Entre los primeros, se ha referido al cambio de mentalidad que arrancó en la década de los años 70 y 80 con la consolidación de valores positivos como la igualdad de género, el empoderamiento de la mujer o su acceso al mercado de trabajo, que provocaron que «la construcción de familias se inicie más tarde que hace 50 años y se reduzca el número de hijos».
Respecto a los factores materiales, se ha referido al empleo, la vivienda o la renta disponible que hacen que «la actitud y predisposición a tener hijos sea más cautelosa». «La media de hijos está en torno al 1,2-1,3 cuando la media que se considera deseable para garantizar la reposición generacional es de 2,1», ha añadido.
En este contexto, ha defendido la utilidad de la 'Estrategia Vasca 2030 para el Reto Demográfico' que incluye un conjunto de medidas que tienen como objetivo «orientar una respuesta al problema de la crisis demográfica».
«Algunas de las iniciativas más destacadas son una ayuda de 200 euros al mes por hijo hasta los 3 años que se pondrá en marcha este año. El decreto se podrá aprobar en pocas semanas y a partir de febrero o marzo ya se podrán hacer las solicitudes. En todo caso, las ayudas se abonarán con efecto retroactivo», ha detallado.
Asimismo, ha incidido en que a partir del curso 2023/2024 se establecerá la gratuidad de las haurreskolak para menores de 2 años que también busca favorecer la conciliación y crianza de hijos.
«Son, en total, 36 medidas que buscan un ecosistema favorable para la construcción de familias, emancipación de jóvenes y la crianza de hijos, conciliando la vida personal y laboral. El objetivo es que se puedan tener los hijos que se desean cuando se desean», ha concluido.