La Puerta del Sol quedará despejada y «plenamente accesible» en el Puente de la Constitución «a flata de varios remates que se retomarán tras la Navidad», ha anunciado este lunes el alcalde de la capital, José Luis Martínez-Almeida, durante una visita a las obras junto a la presidenta regional, Isabel Díaz Ayuso; la delegada de Obras y Equipamientos, Paloma García Romero, y el concejal-presidente del distrito Centro, José Fernández.
Hasta esta fecha, el espacio irá siendo liberado «de manera progresiva», y solo permanecerá vallado el espacio donde se ubicará la estatua ecuestre de Carlos III y la lámina de agua. A día de hoy, un 75% de la plaza y un 80% de la Carrera de San Jerónimo están pavimentadas y ya se han completado los trabajos en las calles Tetuán, Preciados y Carmen. En la calle Arenal falta aún la colocación de unos bolardos retráctiles.
Una vez pase la festividad de Reyes, el 6 de enero, se continuará completando la fuente, se moverán el Oso y el Madroño y la Mariblanca a su nueva ubicación, se instalarán los quioscos y se intervendrá en las calles Vitoria y Espoz y Mina.
«Podemos garantizar que en el Puente estará toda la superficie peatonal libre para el tránsito, y durante todo el Puente todos los que vengan, podrán transitar. Además, todos los que estén en Madrid podrán tomar las uvas en la Puerta del Sol, y todos los españoles la podrán ver», ha expresado el primer edil.
Almeida ha puesto en valor la «reordenación de elementos monumentales, el reparto del espacio, la ordenación de quioscos que se agruparán en dos zonas» que se ha conseguido con las obras, después de las que «quedará un espacio mucho más limpio y ordenado para todos los que pasan por aquí».
«Pido disculpas a los madrileños por este frenesí de las obras. Hubiera sido difícil acometer esto sin el apoyo de la presidenta, a quien le agradezco», ha añadido.
Por su parte, la presidenta regional ha hecho hincapié en que estas son unas obras que afectan a plazas «emblemáticas», del «corazón de España», y de las que más «interés» ha suscitado a madileños y visitantes. «Todo el mundo está deseando volver a ellas», ha sostenido Ayuso, quien ha celebrado que se realicen en tiempo.
La dirigente madrileña ha bromeado con que no solo los comerciantes de la zona están deseando que acaben sino también los trabajadores de la Real Casa de Correos, sede de la Presidencia de la Comunidad. Será, según la presidenta, «un gran alivio volver a transitar» por la zona «con normalidad».
Además, ha puesto en valor el trabajo conjunto de la Administración autonómica y la local que han hecho posible que Madrid esté viviendo «un momento único» y esté «más viva y más de moda que nunca». «Pocas veces se había hablado tanto de ella dentro y fuera de nuestros límites», ha remarcado.
PONTEJOS
Además, las obras que harán accesible la plaza de Pontejos de la capital, al lado de la Puerta del Sol, comenzarán esta próxima semana. Este espacio ocupa cerca de 750 m2. Los lados norte y oeste de la plaza quedan flanqueados por edificios que datan de finales del siglo XIX y principios del XX. Su límite este lo marca la calle del Correo y el límite sur, la calle del Marqués Viudo de Pontejos, no habiendo un límite físico que separe estos espacios.
Con las obras se va a crear una nueva plaza frente al remozado Teatro Albéniz, con bancos y arbolado de sombra, que funcionará como espacio de recepción y encuentro durante la entrada y salida de los espectáculos.
Tanto la calle San Ricardo como la calle de La Paz se configuran como plataformas únicas con un único pavimento y se eliminan los bolardos que actualmente entorpecen la circulación peatonal.