La militancia de ELA del Metal de Bizkaia ha celebrado este lunes una asamblea en la que ha decidido convocar huelga en el sector del 28 de noviembre al 2 de diciembre, coincidiendo con los cinco días de paro convocados la pasada semana por el resto de sindicatos (CCOO, LAB, UGT, ESK, CGT y CNT) tras fracasar la reunión negociadora mantenida con la Federación Vizcaína de Empresas del Metal (FVEM).
En un comunicado, ELA ha señalado que en la asamblea de esta mañana se ha vuelto a constatar que la patronal «continúa aferrada a los privilegios que le ofrece el convenio». «Un convenio que nada tiene que ver con la bonanza económica que en los últimos años acumulan la inmensa mayoría de las empresas del sector, y está hecho a medida de la patronal», ha agregado.
En su opinión, FVEM quiere continuar «empobreciendo a quienes trabajan en el sector, negando el incremento salarial del IPC, que sí aplican las empresas a sus productos».
Ante esta coyuntura, el sindicato nacionalista va a continuar apostando por «confrontar con quienes niegan el reparto de la riqueza» que los trabajadores generan, por lo que se ha reafirmado en su compromiso por una negociación «transparente», donde los contenidos mínimos de firma son conocidos y clarifican a los metalúrgicos los objetivos de la lucha.
Asimismo, ELA considera «positivo» avanzar a jornadas de huelga consecutivas, tal y como ha venido planteando en los últimos meses.
Sin embargo, si no se alcanza en esos cinco días acuerdo alguno, considera necesario convocar una huelga indefinida que suponga un «impulso definitivo» para la negociación.
ELA va a trasladar al resto de sindicatos estos planteamientos y ha vuelto a reafirmar su voluntad de lograr una unidad de acción en los contenidos de negociación y en los compromisos de firma. «Conseguir un acuerdo en estas materias supondría un gran impulso para la consecución de un nuevo convenio como el que merecen quienes trabajan en el sector», ha concluido.