El presidente de Aragón, Javier Lambán, ha opinado que el debate sobre los impuestos «no lo estamos enfocando bien» y, entre otras cosas, «exageramos, a veces, el peso que tiene la fiscalidad autonómica tanto en la fiscalidad general, como en la política económica».
El jefe del Ejecutivo aragonés ha respondido así a una pregunta formulada durante su participación en la jornada 'Aragón, construyendo futuro. Un encuentro sobre los retos y estrategias para el futuro de la economía aragonesa', organizada, en Madrid, por el diario El País, el Gobierno autonómico y con la colaboración de la Cadena Ser.
A su entender, «la fiscalidad autonómica es prácticamente irrelevante en cuanto al desarrollo de la economía y el peso de la misma en el conjunto de la fiscalidad es prácticamente mínimo», otra cosa es el «ruido» que producen los debates sobre qué hace una autonomía o qué hace la otra, ha esgrimido.
Lambán ha señalado que hay un partido político «que toda su intervención en el debate público es plantear bajada de impuestos», antes de que hubiera inflación, ahora que la hay y también lo hará después, ha considerado.
El presidente aragonés ha estimado que éste es un debate «fundamental», pero que hay que plantear en relación al modelo de sociedad que se defiende, de manera que primero «habrá que definir qué servicios públicos queremos, qué Estado, que políticas económicas» y, luego, qué fiscalidad.
Ha asegurado que en esta materia «no soy dogmático», aunque sí ha dicho que como defensor del Estado del Bienestar siempre apoyará una fiscalidad «suficiente».
También se ha mostrado partidario de que todos los presidente autonómicos fueran capaces «de reconducir al terreno de la razón, del sentido común» esta cuestión y «tender a la armonización en la mayor medida de lo posible», si bien ha advertido de que hay un ámbito de decisión de las comunidades autónomas en materia de fiscalidad «que defenderé a muerte, como cualquier otro ámbito de decisión que puede tener la comunidad autónoma».