El 'president' de la Generalitat, Ximo Puig, ha reclamado «subsanar» las necesidades de la provincia de Alicante, al considerar que no están «suficientemente reflejadas» en el proyecto de Presupuestos Generales del Estado (PGE) de 2023, con el fin de que las cuentas para el próximo año puedan «atender algunas de las reivindicaciones históricas» de esta provincia, y ha confiado en que estas cuestiones se puedan «replantear» a través de enmiendas.
«Son manifiestamente insuficientes (...), no podemos estar de acuerdo», ha expresado Puig este viernes en declaraciones a los medios después de visitar el Museo de Mariano Benlliure en Crevillent (Alicante). En todo caso, el jefe del Consell ha señalado la necesidad de ver «en profundidad» el proyecto presentado este jueves por la ministra María Jesús Montero, pero ha apuntado que, si se tienen en cuenta «los grandes números», los PGE «se aproximan a la demanda del Estatut d'Autonomia».
Sin embargo, atendiendo al reparto interno entre provincias en la Comunitat Valenciana, Puig ha considerado que «no se puede estar de acuerdo» con la asignación. Por ello, ha apuntado que la Generalitat va a «estudiar bien» las cuentas generales y ver «si es posible» atender «algunas de las reivindicaciones históricas» y que «se replanteen a través de enmiendas algunas cuestiones que son manifiestamente insuficientes».
Puig ha incidido en que, a su juicio, resulta «difícil de justificar» esta cuestión que, ha lamentado, «se arrastra en los últimos años», situación frente a la que ha defendido que la Generalitat sí que ha hecho «una distribución y reparto de la inversión para que se atienda la realidad de todas las comarcas». Por ello, desde el Consell se sienten «legitimados» para instar al Gobierno a que «haga lo mismo».
En el conjunto de la Comunitat Valenciana, el 'president' de la Generalitat ha valorado que los Presupuestos «se aproximan» a la demanda del Estatut d'Autonomia de que la asignación alcance el 10 por ciento del total del Estado.
«Es cierto que los Presupuestos tienen una visión social», ha reconocido, al tiempo que ha destacado el incremento de la inversión en políticas sociales, porque, ha defendido, los PGE «no son solo inversiones, sino muchas otras cosas».
Así, ha mencionado el aumento de las pensiones y del conjunto de los salarios como la «parte positiva» de los PGE que, «sobre todo, tienen que contribuir a frenar la inflación y que continúen generando actividad económica, fundamental para la ocupación».