La compañía mixta Jaizkibel, en la que las mujeres participan también como soldados en el Alarde de Hondarribia y que cumple 25 años, ha desfilado este jueves en la localidad guipuzcoana. El municipio costero recupera su fiesta tras dos años sin poder celebrarse a causa de la pandemia.
Jaizkibel, con cerca de un millar de integrantes y con Oihana Etxebarrieta como capitana, ha partido desde los jardines de Gernikako Arbola y ha realizado su desfile por la calle Mayor y la plaza de Armas, sin que en esta ocasión hubiera personas cubiertas por plásticos negros, en un ambiente festivo y sin la tensión de otros años, para terminar en la ermita de Saindua.
Al término del desfile, Etxebarrieta se ha felicitado por que «ha quedado claro que Jaizkibel es una compañía cada vez más grande» y que hay cada cuentan con más apoyo social. También ha resaltado que en Hondarribia hay una mayor «actitud activa a favor de la solución» y «cada vez más ciudadanos lo piden».
La capitana ha emplazado al alcalde, Txomin Sagarzazu, a que ponga en marcha una «mesa de diálogo». Ha recordado que hasta la fecha ha habido varias iniciativas que «no han dado sus frutos», pero se ha mostrado convencida de que los vecinos de Hondarribia «así lo piden» y que «es el momento» de poner en marcha ese proceso de diálogo.
La directora de Emakunde, Izaskun Landaida, la adjunta al Ararteko, Inés Ibáñez de Maeztu, la secretaria de Feminismos de Podemos Euskadi, Garbiñe Ruiza, los miembros de Ezker Anitza-IU, Iñigo Martínez y Arantza González, así como representantes de EH Bildu han estado presentes en esta fiesta para mostrar su apoyo a Jaizkibel.
Por su parte, el alarde tradicional, que cuenta con la participación de en torno a 5.000 hombres y 20 cantineras en 20 compañías, ha desfilado con normalidad, una hora después, desde los jardines de Gernikako Arbola.