Varios cientos de personas han formado este sábado por la tarde una cadena humana que ha recorrido el recinto festivo de Bilbao para protestar por las agresiones machistas y racistas, y para reclamar unas fiestas «sin ataques» de ningún tipo.
Convocadas por las comparsas de Bilbao, dos cadenas humanas han salido a las 17.30 horas desde la Plaza del Arriaga para recorrer, por lados opuestos, el recinto festivo, y confluir posteriormente en el punto de partida, frente al Teatro Arriaga.
Portavoces de Bilboko Konpartsak, acompañadas de la txupinera y pregonera de Aste Nagusia 2022, Itziar Lazkano e Iratxe Palacios, respectivamente, han leído en castellano y euskera un texto en el que han denunciado que este pasado viernes han tenido que activar, por segunda vez en esta Aste Nagusia, el «protocolo contra las agresiones en Aste Nagusia».
Por un lado, han mostrado su repulsa ante «muchas actitudes y agresiones machistas contra las mujeres» que se han registrado en el espacio festivo, como «tocamientos, insultos y baboseos», y por otro lado, han condenado «actitudes racistas contra gente racializada».
Asimismo, han señalado que la Policía Municipal ha realizado identificaciones a manteros «de forma bastante violenta». También han censurado que agentes de la Policía Local «se hayan dirigido de madrugada contra los miembros de Atxuri Harrera», que colaboran con las comparsas «en la recogida de vasos», para retenerles en un portal.
«Les han cacheado, han rastreado los móviles y han procedido a su identificación por su procedencia, sin atender las explicaciones del colectivo», han apuntado.
Ante ello, han asegurado que están «hartos» de todas estas situaciones y han condenado «cualquier acto contrario a la voluntad de las mujeres y de las personas racializadas».
«Estamos hartos de los ataques que condicionan nuestra vida en nuestro derecho a vivir las fiestas en libertad. Queremos un espacio festivo sin violencia, independientemente de el agresor sea policía o un machirulo. ¡Por una Aste Nagusia libre de agresiones, ningún ataque sin respuesta!. La calle, la noche y las fiestas también son nuestras», han subrayado.
Durante el recorrido, las personas que formaban la cadena humana han portado pañuelos morados y amarillos (estos último de 'Ongi etorri Errefuxiatuak'), y han proferidos gritos contra las agresiones contra las mujeres y contra los migrantes.