Agentes de la Policía Nacional, en el marco de la 'operación Tattoo', han detenido en Almería a tres hombres relacionados con un centro de tatuajes y piercing de la capital, ya clausurado por orden judicial, que operaba "sin medidas mínimas de higiene" en el local y sin capacitación o habilitación para realizar esta actividad.
A los arrestados, de nacionalidad colombiana, se les investiga por la presunta comisión de un delito contra la salud pública y otro contra los derechos de los trabajadores.
La actuación comenzó tras tener conocimiento la Comisaría Provincial de que, que en un establecimiento de la capital se estaban realizando tatuajes y colocación de piercing, sin que las personas que los efectuaban estuviesen capacitadas ni habilitadas para realizar estas actividades.
Además, estos trabajadores carecían de un permiso de trabajo o residencia en España, y por consiguiente, no estaban tampoco dados de alta en la Seguridad Social.
Los agentes encargados de la investigación realizaron una visita en el establecimiento con la colaboración de la Inspección Provincial de Trabajo y Seguridad Social de Almería, y con la Delegación Territorial de Almería de la Dirección General de Salud Pública y Ordenación Farmacéutica de la Junta de Andalucía.
En el interior del local se localizó una habitación donde se hacían tatuajes y se ponían piercing, pero que no contaba con las medidas mínimas de higiene requeridas.
Productos no homologados y caducados
Asimismo, tras inspeccionar los materiales y útiles de trabajo, los agentes de salud pública verificaron que se trataba de productos no homologados, caducados y no adecuados para dichas prácticas.
Durante la inspección fueron identificadas tres personas que no contaban con ningún tipo de capacitación ni autorización que los habilitara para realizar estas prácticas. El registro concluyó con su detención por dos delitos y por una infracción a la Ley de Extranjería.
A su vez, por parte de la Inspección Provincial de Trabajo, y de la Delegación Territorial de Almería de la Dirección General de Salud Pública y Ordenación Farmacéutica de la Junta de Andalucía, se ha procedido a abrir varios expedientes sancionadores por las diferentes infracciones encontradas durante la inspección.
El Juzgado de Instrucción 3 de Almería ha ordenado la clausura, precinto y cese de la actividad del local situado en la Rambla Amatisteros de la ciudad.