La diabetes afecta a 6 de cada 100 ciudadanos de Baleares con tarjeta sanitaria y aumenta especialmente entre los jóvenes como consecuencia del sedentarismo y el consumo de bollería. Los profesionales temen que la enfermedad, especialmente la de tipo 2 (la no inmunológica) esté infradiagnosticada y en caso de subidas de azúcar actuar con la máxima celeridad es vital para evitar complicaciones como amputaciones, ceguera o daños permanentes en el riñón.
¿Cuáles son los síntomas que pueden esconder una diabetes? Cuando falla la insulina, los pacientes notan mucha sed, van muchas más veces al baño y tienen mucha hambre. A pesar de que aumentan la ingesta de comida sufren una pérdida importante de peso y un aumento del cansancio y de la irritabilidad. Es una cuestión que los profesionales describen como paradógica.
En caso de que se detecten estos síntomas es importante acudir al médico y trasladarle tus sospechas porque una intervención rápida y detección precoz de la enfermedad puede evitar complicaciones graves para los diabéticos, una enfermedad crónica que afecta no solo a los adultos sino también a los niños. El sindicato de enfermeras Satse avisa de que «casi un 40% de los niños y niñas de 3 a 8 años sufren obesidad infantil». «España es el segundo país europeo con mayor índice de obesidad y la obesidad está directamente relacionada con la diabetes. Ya hay diagnosticados 35.000 menores de 15 años con diabetes en España. Cada año se diagnostica de esta enfermedad a 1.000 niños.