José Luis Morales, Marcelino Elena, Jovan Stankovic, Carlos Domínguez, Samuel Etoo, José Carlos Nunes, Lago Junior, Ante Budimir, Vedat Muriqi... Todos forman parte de la historia del Mallorca y tienen un denominador común: abrieron la puerta del vestuario en el mercado de invierno. La segunda ventana para firmar futbolistas, que oficialmente se abre este jueves y se prolongará hasta el 3 de febrero, no suele generar dividendos, pero en el caso del Mallorca hay excepciones. Jugadores que recalaron en la Isla en busca de oportunidades que no tenían en sus clubes de origen, que llegaron en algunos casos para cumplir con el expediente en forma de cesión para unos meses y que, sin embargo, prolongaron su estancia para convertirse en grandes ídolos de la hinchada por su rendimiento.
A comienzos de la década de los 90, aquel Mallorca presidido por Miquel Contestí y dirigido desde el banquillo por Llorenç Serra Ferrer, recurrió a una legión de futbolistas de la extinta Yugoslavia para intentar obrar el milagro de la permanencia. Vlada Stosic y Goran Milojevic reforzaron a la plantilla en el mercado invernal y la mejoría fue notable, aunque finalmente no se pudo evitar el descenso a Segunda.
En la categoría de plata, José Luis Morales supuso un impulso (marcó 15 goles en la segunda vuelta) aunque tampoco se logró el objetivo del ascenso al caer ante el Rayo en la promoción. Al año siguiente resultó clave otro fichaje invernal, el sevillano Carlos Domínguez, que marcó el gol que devolvió al Mallorca a Primera División... tras un centro de Jovan Stankovic, que llegó también en enero como un auténtico desconocido, al igual que Marcelino Elena, que llegó a ser internacional absoluto.
Pero sin duda alguna la ganga de invierno que mejores resultados ha dado en la historia ha sido Samuel Etoo. El camerunés, sin sitio en aquel Real Madrid de Florentino y los galácticos, recaló en la Isla en febrero del año 2000 para convertirse en el máximo goleador de la historia mallorquinista en Primera y en el artífice del título de la Copa del Rey de 2003. El extranjero con más partidos vistiendo la camiseta del Mallorca en la elite y segundo en la historia tras Miquel Ángel Nadal, el portugués José Carlos Nunes, llegó procedente del Braga y permaneció durante ocho temporadas. Hace menos de una década, en 2016, Lago Junior también irrumpió en enero para resultar determinante en los ascensos de Segunda B a Primera.
Los últimos ejemplos de saldos de enero que rindieron son los del croata Ante Budimir y del kosovar Vedat Muriqi, dos de los mejores goleadores que ha tenido el Mallorca en la historia reciente. Veremos qué le depara al club balear un mercado difícil en el que se suele mover muy bien.