La Policía Nacional ya ha identificado al aficionado que realizó gestos racistas en Son Moix durante el partido del pasado sábado entre el Real Mallorca y el Real Madrid. Se trata de un menor, que estaba en el campo acompañado de un familiar y que además arrojó dos botellas al terreno de juego tras la celebración del gol conseguido por Aurélien Tchouameni para el conjunto blanco.
Los hechos, captados por Movistar+, ocurrieron sobre las 19:32 horas, coincidiendo con la celebración del gol del Madrid que después sería definitivo, tal y como confirman las cámaras de la UCO. En principio solo se detectó el lanzamiento de objetos, lo que motivó que dos agentes de policía próximos a la zona se acercaran a identificar al ahora denunciado. Se trataba de un menor de edad acompañado de un familiar y tras repasar las imágenes se comprobó que había estado «haciendo gestos con los brazos» a los futbolistas del Madrid «simulando como si fuera un mono». Posteriormente «realizó una peineta hacia los mismos jugadores» y «arrojó una segunda botella».
Los agentes de la UCO de la Policía Nacional han emitido propuesta de sanción a la Comisión Antiviolencia, a lo que hay que sumar las sanciones que le pueden generar por el propio Mallorca, que este mismo domingo condenaba los hechos a través de un comunicado.
Eso ocurre en otro encuentro que no sea contra el Madrid y pasa desapercibido