El andaluz José Luis Munuera Montero, que arbitrará la final de la Copa del Rey de este sábado entre el Athletic Club y el Mallorca en Sevilla, afirmó que él y su equipo afrontan la cita «preparados» y «con una enorme responsabilidad», aunque «esto es como los melones: cuando los abres, nunca sabes lo que te vas a encontrar».
En la sala de prensa del estadio sevillano de La Cartuja, escenario de la final en la que tendrá en el VAR al navarro Eduardo Prieto Iglesias, el colegiado andaluz destacó este viernes que está «superilusionado» con pitar este partido, lo que supone «un reto y un objetivo en lo profesional», y que «en lo personal» le hace estar «muy contento y muy feliz».
«No me gusta hablar de presión nunca, sí de responsabilidad, siempre. Somos conscientes de lo que se juegan los dos equipos y también nosotros, por eso estamos supercontentos e ilusionados. Esperamos que sea una fiesta, que la gente disfrute y que el domingo se hable lo menos posible», aseveró en rueda de prensa el árbitro principal de la final.
El colegiado internacional, de 40 años y que dirigirá su primera final, deseó que «los jugadores se comporten adecuadamente, haya muchos goles y no haya ninguna polémica», dijo que tienen «bien estudiados a los dos equipos» porque siempre hacen ese trabajo cada semana y en esta ocasión, además, sus dos asistentes han preparado el preceptivo «resumen técnico» previo a los partidos.
El jiennense aseguró, en este sentido, que saben «qué partido» se van a encontrar, pero incidió en que «esto es un melón» sin calar y «nunca sabes cómo puede discurrir», aunque recalcó que «lo que dependa» del cuerpo arbitral lo tienen «controlado», mientras que para el resto se irán «adaptando lo mejor posible» conforme vaya la final.
«Una final es una final, hay mucho más de emoción, sentimiento e intensidad, además de juego, lógicamente, pero los dos equipos vienen a dar cien por cien. Somos conscientes de ello y vamos a trabajar en lo que depende de nosotros y siendo muy conscientes de los distintos escenarios que nos podemos encontrar, según se adelante uno u otro en el marcador», explicó.
Preguntado por el hecho de que esta temporada haya acudido dos veces al VAR y él se haya ratificado en su decisión inicial, dijo que esta herramienta «es un miembro más que tiene el árbitro sobre el campo y lo importante es que cuando vayas a la pantalla, tú decidas en última instancia la decisión que para ti es la mejor». «Muchas veces pasa que puedes estar en desacuerdo con lo que te transmite tu compañero (del VAR) y por ello puedes ratificarte, pero no es nada negativo, sino todo lo contrario», precisó.
Munuera Montero subrayó que, aunque una final como ésta conlleva «una enorme responsabilidad», ellos también disfrutan «del trabajo que se realiza porque, al final, el árbitro es también un deportista, tiene pasión por lo que hace, por cada partido, y esto hace que salgan mejor las cosas, lo que no quita que tienes que ser responsable y darlo todo antes y durante el encuentro».
Negó que tengan menos presión porque no estén en la final copera equipos 'grandes' como Barcelona o Real Madrid, ya que «la responsabilidad es la misma y el error te merma de la misma forma», con lo que la afrontan igual y, además, «el ambiente es espectacular, increíble».
«Esta mañana venía de Córdoba, es un orgullo estar en mi tierra, en Andalucía. Esa emoción y ese ambiente de las dos aficiones hace que te contagies y que esa responsabilidad sea mucho mayor», resaltó el colegiado andaluz, quien incidió en que, «más que presión, temor o miedo», los árbitros sienten ese concepto de responsabilidad y de querer que «el partido salga bien».
Añadió que los jugadores también encaran «de forma diferente» una cita de este nivel y que los árbitros tienen que «tener la misma autoridad, pero sin ser autoritarios», y gestionar bien «la actitud» o el carácter de algunos futbolistas «siempre desde la base del respeto mutuo».