Javier Aguirre dispone de su arsenal ofensivo a punto para afrontar esta fase de la temporada tanto en el campeonato doméstico como también con vistas a la semifinal de Copa ante la Real Sociedad. El regreso de Larin, sancionado la pasada jornada, permite al preparador mexicano disponer de sus hombres más letales en ataque y los tres atraviesan ahora mismo por un buen momento.
Abdón Prats sigue dando mucho al equipo cuando está sobre el terreno de juego. El de Artà marca goles, pero además es un elemento dinamizador de juego ofensivo sobre el campo tanto por su capacidad para generar espacios como también por la necesidad de los rivales de tener una cuidado especial sobre él.El mallorquín, tanto con Muriqi como con Larin, permite al equipo rojillo tener mayores recursos de cara a la zona delantera y cuando el técnico juega con dos puntas eso se nota.
Vedat Muriqi por su parte está en plena fase de recuperación tanto física como también mental. Tras un periodo muy largo alejado de los terrenos de juego, el futbolista ha ido poco a poco entrando y acumulando minutos y la pasada jornada anotó el tanto de la victoria frente al Rayo Vallecano, con todo lo que esto supone para un futbolistas que vive del gol y que necesita del acierto. Además fue un gol marca de la casa, con un certero remate de cabeza. Mejor imposible. Era sin duda lo que el kosovar necesitaba para poder tener la certeza de que está en el buen camino y que está muy próximo a volver a ser el que fue desde su llegada a Mallorca.
Completa esta terna de buenas noticias la presencia de nuevo de Larin, que con el paso de los partidos ha logrado ser una amenaza real para las defensas rivales. Su zancada, capacidad de trasladarse a la zona de peligro con balón y posibilidades de generar oportunidades no se ve todavía recompensada con una cantidad de goles acorde a las posibilidades que tiene.
Sin embargo, su evolución durante este curso ha sido constante y también cuando se siente acompañado con otro punta esto le permite aumentar las posibilidades de marcar.
Ante la Real Sociedad este próximo domingo el Mallorca habrá tenido la posibilidad de entrenar y no forzar con partido entre semana, algo que el rival no ha podido hacer tras perder en partido de la Liga de campeones frente al PSG.
Una situación que el conjunto bermellón tiene que aprovechar para conquistar otro triunfo y seguir tomando impulso además de mantener o aumentar la distancia con la zona de descenso, que actualmente es de seis puntos.