La plantilla del Real Mallorca cree que este domingo debería haber caído la primera victoria de la temporada en Son Moix. Los futbolistas del conjunto bermellón lamentaban un nuevo empate frente a un rival directo, en este caso el Deportivo Alavés, aunque confían en las posibilidades del equipo en la carrera por salir de la zona baja de la clasificación.
«El equipo ha hecho muchas cosas buenas», aseguraba el capitán, Antonio Raíllo. «Si miras el global del encuentro, el Mallorca ha merecido bastante más y las ocasiones claras las hemos tenido nosotros. Al final te quedas con las sensación de que no te llevas los puntos por muy poco, como el día del Cádiz», valoraba el central cordobés.
«El equipo arriba genera y atrás concede poco, pero el fútbol es acierto en las áreas y si no tienes es muy difícil ganar. En el momento que lleguen los goles de Larin, que llegarán, cambiará la dinámica. Porque ni no, se nos hará cuesta arriba». Según Raíllo, «vienen partidos asequibles antes del parón de Navidad» que pueden hacer que el equipo obtenga «un buen colchón».
Omar Mascarell, que volvía al once titular después de dos jornadas viendo empezar los partidos desde el banquillo confesaba que los jugadores se iban «un poco dolidos». «Sobre todo por la segunda parte porque en la primera hemos estado más imprecisos», decía el canario. «Hemos ido a por el partido, hemos tenido ocasiones y hemos sido mejores que el Alavés. Estamos más vivos que nunca y el equipo trabaja muy bien».
«Somos ambiciosos y si no ganamos estamos tristes», afirmaba el centrocampista portugués Samú Costa. «Tenemos que seguir peleando. Estamos pasando un momento difícil, pero esto debe ser un desafío para seguir mejorando», añadía.