Tranquilo y relajado, como su equipo tras la victoria del pasado lunes en Balaídos, Javier Aguirre analizaba este sábado el próximo partido del Real Mallorca. Los baleares recibirán en Son Moix (domingo, 18.30 horas) a un Getafe mucho más necesitado que, en cualquier caso, acostumbra a meter en líos al conjunto bermellón en sus enfrentamientos directos. «Nos ha ganado los partidos que he jugado contra ellos desde que llegué aquí», apuntaba a modo de aviso el entrenador mexicano, que a su vez se niega a dar por zanjado el asunto de la permanencia en Primera División.
«El equipo anímicamente está bien y lo cierto es que nunca le hemos perdido la cara ni a los entrenamientos ni a la competición», destacaba Aguirre antes de apuntar que para el partido contra el Getafe seguirá sin poder contar con Nastasic, Augustinsson y Gio, aunque recupera a Jaume Costa, Copete y Dani Rodríguez. La duda está ahora sobre Raíllo, que arrastra algún problema físico. En la convocatoria, según confirmaba el propio entrenador, entrarán Josep Gayà y Benjamín Garay.
Aguirre no se fía lo más mínimo del Getafe. Fue el equipo que amargó el estreno del mexicano a su llegada al club y el pasado mes de diciembre, en el primer partido postmundial, también dejó al Mallorca en blanco. «Quique (Sánchez Flores) es un grandísimo técnico, con mucha experiencia y no podemos vender la piel del oso antes de cazarlo», explicaba antes de reconocer que ganando la salvación será casi un hecho. «Aún así la Liga seguirá», matizaba. Al mismo tiempo, el Vasco confirmaba que medita repetir la linea defensiva de las últimas semanas para recibir a los azulones.
El pasado lunes, contra el Celta, Aguirre cumplió 38 partidos como entrenador del Mallorca. Toda una Liga, en la que sumando los puntos de una temporada y otra el equipo balear contaría con 50 y sería octavo en una hipotética clasificación limitada únicamente a esa franja. «Hemos sido regulares en la forma de juego», subrayaba a modo de balance. «Sí que hemos logrado que el equipo crea en este trabajo ordenado y hemos mejorado nuestros mecanismos ofensivos. Tenemos aún un déficit ofensivo y me gustaría mejorar eso, tener mas llegada y mas gol», resumía.
Con respecto a su posible renovación, Aguirre según sin aclarar mucho. «No ha habido novedades. Lo dejé en las manos de mi representante. Estoy muy contento aquí y mi mujer también, pero en fútbol nunca debes dar nada por sentado. Hasta que no este matemáticamente cerrado voy a ser escéptico. El fútbol es muy competitivo». En cualquier caso, también apuntaba que, si renueva, no se meterá demasiado en la planificación del nuevo proyecto. «Nunca me he metido en la configuración de la plantilla, jamás. No sugiero jugadores, aunque sí que digo lo que se necesita y me voy. Me llaman y me dan opciones. La única vez que me empeñé y dije quiero a estos dos sí o sí, me fue como al perico porque en diciembre me echaron. Mejor no me meto más», bromeaba. «Me gusta Palma para vivir, el estadio, Son Bibiloni, el trato con la gente...».
Por último, Aguirre mandaba un cariñoso mensaje a la familia de Patxi Izco, el expresidente de Osasuna fallecido recientemente. «Quiero trasladarle todo mi cariño a María Jesús, a sus hijos, a sus nietos, Gracias a Patxi estoy aquí. De mis primeros nueve partidos perdí seis, pero habló conmigo y me aguantó», contaba.