Una final. Ahora sí. El Mallorca-Getafe de este domingo (18:30 horas, Son Moix) es el partido del año. Ni Barça, ni Madrid. El encuentro que marca el futuro del equipo rojillo es el que jugará en el estadio de Camí dels Reis contra el conjunto de Quique Sánchez Flores. Los números son claros. Un triunfo situaría al equipo de Javier Aguirre con 40 puntos, una cifra que sellaría la salvación virtual a falta de pescar algún punto más en las ocho jornadas restantes, algo que resulta más que evidente que se conseguirá. Pero el partido que dará tranquilidad, que permitirá mirar al horizonte con calma y sin agobios es el de este domingo.
Deportivamente el equipo trabaja para ganar y desde el exterior se empieza a preparar el partido para que a los jugadores no les falta el apoyo desde la grada. En este sentido el Moviment Mallorquinista ha puesto en marcha un plan para que todos los seguidores que lo deseen puedan vivir juntos la previa del encuentro desde la una de la tarde.
En el bar Son Moix, justo al lado del Pabellón deportivo, hay preparado un menú ‘Especial salvación'. Por 14 euros se servirá un primer plato que constará de ensalada de pollo o canelones con carne y un segundo (tumbet con huellos fritos o lomo). A esto hay que añadir el postre y las bebias y de 13 horas a 16 se venderán cervezas a 1,50.
Ahí empezará la animación de un partido de la máxima donde los tres puntos tienen que quedarse en casa sí o sí. El Moviment ha trabajado también junto al club en preparar una sorpresa a todos los seguidores de la nueva grada este y que descubrirán cuando accedan al recinto deportivo. Sebastià Oliver, presidente del Moviment, explicó que «con vistas a esta iniciativa necesitamos la ayuda de voluntarios. Pueden darnos sus datos de contacto a través del correo electrónico del Moviment», explicó.
La otra cita imprescindible está fijada a las 16:45 horas cuando todos los seguidores se trasladarán a la puerta cero del estadio para hacer el pasillo al autobús del equipo. «Hacemos un llamamiento a todos los seguidores y aficionados. Este domingo el equipo nos necesita y no podemos fallar. Tenemos que ir todos de rojo y el primer gol lo tenemos que marcar desde la grada», indicó Sebastià Oliver. La prevision es que el estadio roce el lleno. El jugador número doce no fallará en el partido del año.