El entrenador del Real Mallorca, Javier Aguirre, ya cuenta las horas para su reestreno en la Liga. Tras una semana de trabajo al frente del equipo, el mexicano dirigirá este sábado su primer partido contra el Getafe (Coliseum Alfonso Pérez, 14.00 horas), en el que espera poner la primera piedra del camino hacia la salvación. Para su debut, el técnico amontona varias bajas en defensa (Raíllo, Jaume Costa y Sedlar) y desplazará a 24 futbolistas a Madrid, ya que los internacionales apenas han podido entrenar y han llegado «fatigados» de sus respectivas convocatorias internacionales. «La primera impresión es buena porque todos tenemos muchas ganas, pero no nos ha dado tregua el clima. No me lo esperaba. Pero salvo esa tontería, bien», empezaba relatando este viernes Aguirre desde la sala de prensa de Son Bibiloni.
Sobre el Mallorca que se verá en Getafe, Aguirre no concede demasiadas pistas. «No quisiera comparar con lo que ha habido hasta ahora. Conseguir puntos suficientes como sea es lo único que pretendo. Luego, ojalá sea jugando bien y superando rival en aspectos tácticos, pero eso sería escenario ideal», comentaba. En cualquier caso, el nuevo técnico bermellón entiende que el partido del Coliseum «tiene que marcar estado de ánimo». «No estamos para hacer cosas ilógicas y en este cuerpo técnico no tenemos bola de cristal o una varita mágica. Vamos a contrarreloj y los resultados te inyectan ánimo o desánimo. Cuando estás en esta dinámica no es el mejor momento para echar risas como si no pasara nada. Hay muchas ganas y deseos, pero me encontré un grupo un poco lastimado anímicamente. He intentado que equipo se sienta vivo. Estamos a un punto y faltan 27 por disputar. Estamos a tiempo de conseguir el objetivo».
El preparador mallorquinista tiene muy buenas palabras para su primer rival. «El Getafe me gusta mucho», destaca. «Quique (Sánchez Flores) levantó al equipo, que es rocoso y sólido. Juega muy junto y con mucha calidad también. Será un partido disputado por ambas partes. Espero un Geta intenso y aguerrido. Será un duelo bravo porque nadie regalará nada».
Aguirre, que durante la semana ha tenido que tirar de las categorías inferiores para completar los entrenamientos, reconoce que alguno de los jóvenes le ha llamado la atención. «Hay dos o tres chicos del filial que me han sorprendido gratamente», explicaba, incidiendo después en el lateral zurdo Marcos Fernández. «Me dicen quienes le conocen que les recuerda a Ximo Navarro. No lo conocía de nada, porque por ejemplo a Javi Llabrés sí lo había visto. Y otro es Leo (Román), el portero. Tiene calidad, buena planta, es un buen chaval. Vino ayer de la sub'21 y me llamó la atención».