El Mallorca ha acabado disparando al aire la bala extra que escondía en el cargador. Minimizado en todo momento por una Real Sociedad con mucha más corpulencia y talento, el equipo de Luis García aparcaba este miércoles las buenas sensaciones de las últimas jornadas para dejar a la vista la crudeza de los números: ya encadena tres derrotas consecutivas y tiene una oportunidad menos a la que agarrarse en su caminata hacia la permanencia (0-2).
El equipo balear jugaba casi todo el primer tiempo sobre una pendiente resbaladiza. Aseado y decidido, el equipo de Luis García Plaza salía con la misma cara de los últimos partidos y participaba en un pequeño intercambio de golpes a modo de presentación, pero luego ni podía si sabía darle continuidad y empezaba a sentirse incómodo. Todo lo contrario que la Real Sociedad, que tardaba en levantar los pies del suelo lo que tardaban sus mejores futbolistas en ensamblar la maquinaria del centro del campo y en empezar a afinar los violines. En cuanto apartaba del camino las piedras que le ponían en la sala de máquinas, el equipo de Imanol iba conquistando terreno y amasando a su gusto un partido que a la media hora ya era de su propiedad.
La fractura total llegó a diez minutos para el descanso. El cuadro donostiarra, que ya había subido la temperatura y cocinaba a fuego medio, encontraba la luz en un delicioso pase de Mikel Merino en la zona roja del campo. Duda hasta poco antes de que la expedición subiera al avión, el centrocampista navarro era titular e iba a cargar él solo con más de la mitad de la victoria. Conectaba de primeras con David Silva y el mediapunta canario, que llevaba más de una década sin esparcir su magia por el césped Son Moix, daba con una puerta abierta a la espalda de los centrales y superaba a Sergio Rico, incapaz otra vez de poner el candado. Desde que llegó a Mallorca, el guardameta sevillano todavía no ha dejado ningún día la portería a cero.
Sin nada a lo que aferrarse, el Mallorca trataba de reiniciar el partido aprovechando el paso por los vestuarios y salía dispuesto a absorber la posesión del balón. Empujando por la izquierda y por medio de Dani Rodríguez trazaba su mejor ocasión. Pacheco despejaba como podía ante Muriqi la bola que había metido en el área el centrocampista gallego y acababa la jugada con un remate picado de Take Kubo, ya con el portero vencido, que se largaría fuera. Ahí terminaba de morir un Mallorca que ya no volvería a hacer ni cosquillas.
El encuentro lo apagaba el mismo futbolista que lo había encendido, aunque esta vez sin música clásica de fondo. Mikel Merino recogía una balón suelto en el área a la salida de un córner y marcaba para hacerle un lazo al duelo. Estuvo a punto a adornarse el 8 realista poco después con otro remate envenado, pero esta vez su tiro acabó contra el palo. No entraba, aunque era la señal definitiva para que el Mallorca acabara bajando del todo los brazos.
- Ficha técnica:
0 - Real Mallorca: Sergio Rico; Maffeo (Gio González, min. 80), Valjent, Raíllo, Oliván; Take Kubo (Kang-in Lee, min. 70), Antonio Sánchez (Baba, min. 80), Salva Sevilla (Hoppe, min. 68), Dani Rodríguez; Amath (Llabrés, min. 67) y Muriqi.
2 - Real Sociedad: Remiro; Gorosabel, Le Normand, Aritz (Sola, min. 70), Pacheco; Guevara (Zubimendi, min. 46), Gorosabel (Zubeldia, min. 80), Merino (Illarramendi, min. 85); Portu (Djouhra, min. 70), Sorloth y Oyarzabal.
Goles: 0-1, min. 25: David Silva; 0-2, min. 61: Mikel Merino.
Árbitro: Melero López (Comité Andaluz). Amonestó a los visitantes Mikel Merino (min. 51) y Remiro (min. 76). Incidencias: partido aplazado correspondiente a la jornada 21ª de LaLiga Santander disputado en el Visit Mallorca Estadi ante 11.550 espectadores. Llovió durante algunas fases del partido.