De camino hacia la tranquilidad, el Mallorca está obligado a introducir en el navegador unas nuevas coordenadas. Con Iñigo Ruiz de Galarreta fuera de combate hasta la temporada que viene tras su grave lesión de rodilla e Iddrisu Baba aún en la enfermería, el conjunto balear tendrá que tirar del fondo de armario en los próximos encuentros para dirigir el tráfico en la sala de máquinas y mantener frente al Valencia y la Real Sociedad esa buena dinámica de juego que ha ido recuperando durante el último mes.
Ahora que la defensa se ha estabilizado con la vuelta de Antonio Raíllo y que el ataque ha entrado en una nueva dimensión con la irrupción de Vedat Muriqi, a Luis García Plaza se le ha destapado una grieta en el centro del campo. La desgraciada lesión de Galarreta le deja sin una de sus referencias en la zona ancha y sin el cuarto futbolista de campo que más ha utilizado hasta el momento. Curiosamente, el siguiente en la lista es Baba, que comparte espacio con el eibarrés sobre el tapete y que todavía se recupera de un problema muscular que le ha impedido ayudar al equipo desde que regresó de la Copa de África. En principio, el ghanés no estará disponible hasta el partido contra el Celta (6 de marzo), aunque ya podría entrar en la convocatoria para recibir a la Real Sociedad el próximo miércoles. Se da la circunstancia de que en 23 de las 24 jornadas consumidas hasta la fecha el técnico bermellón siempre ha alineado de inicio a Galarreta, a Baba o a los dos, una fórmula repetida en nueve ocasiones. La única ocasión en la que ambos faltaron a la vez en el once fue coincidiendo con la visita al Santiago Bernabéu, en la que el Mallorca encajó el peor resultado del curso (6-1).
Al conjunto balear no le queda más remedio que encomendarse de nuevo a la brújula de Salva Sevilla. Titular en las tres últimas jornadas, el almeriense circula por uno de los tramos mejor iluminados de la temporada y todo apunta a que repetirá el sábado (14.00 horas) contra el Valencia. Para acompañarle, LGP maneja sobre todo dos alternativas. La primera de ellas y probablemente la que más opciones tiene es la de Antonio Sánchez, que ha mostrado un buen nivel moviéndose en las posiciones interiores. Y la segunda es la del argentino Rodrigo Battaglia, que ha participado en todos los partidos de Liga de este 2022, aunque en los tres últimos lo ha hecho solo apareciendo desde el banquillo. De hecho, el pasado fin de semana tuvo la mala fortuna de ser el autor del penalti que le acabaría dando el triunfo al Betis. Luis García tiene todavía un par de sesiones por delante para decidirse.