El mediapunta coreano Kang In Lee fue el jugador más peligroso del Real Mallorca mientras estuvo sobre el terreno de juego. Sustituido a los 57 minutos por Lago Junior —el miércoles había jugado el partido completo en el Bernabéu—, antes de marcharse al vestuario dejó varias perlas repartidos por el césped de Son Moix.
En la primera mitad lo intentó con un lanzamiento de falta que se fue a la izquierda del palo y después obligó a lucirse a Sergio Herrera, enorme al final del primer acto, con un lanzamiento lejano. El exjugador del Valencia se va encontrando cada vez más cómodo con la camiseta del Mallorca y a su partido de la semana pasada en Chamartín, donde marcó su primer gol, le dio continuidad tirando del grupo frente a Osasuna.
Tras la lesión de Take Kubo le tocará dar un paso al frente para sostener ofensivamente a una formación que necesita de su talento para crecer.