Osasuna sigue moviendo sus tentáculos en el ‘caso Budimir'. El club navarro, que tiene una opción de compra sobre el delantero del Mallorca que expira el próximo 30 de junio, parece decidido a abonar los ocho millones de euros que cuesta el fichaje del croata, concentrado estos días con la selección de su país para preparar la Eurocopa. Sin embargo, y teniendo en cuenta que sería la operación más cara de su historia, estudia una fórmula para hacer efectivo el pago que, según se pactó en octubre al cerrar la cesión, se haría en tres plazos.
«En el caso de Budimir, como ya sabéis perfectamente, existen dos aspectos a tener en cuenta», explicaba este lunes el presidente de Osasuna, Luis Sabalza, en unas declaraciones que recoge el portal Noticias de Navarra. «Primero, que el jugador quiera quedarse, que parece que quiere, y segundo, que tengamos tesorería para poder pagar. Y ese es el problema. Yo le entiendo al Mallorca cuando pide que se pague la cláusula, porque es lo mismo que hacemos nosotros. No podemos pensar que los otros equipos nos van a dejar. Es una cuestión de que tenemos que sacar los números y, si dan, encantados de la vida si el jugador quiere».
«Hay un calendario pactado para el pago de los 8 millones», aseguraba el propio Sabalza. «En unas fechas determinadas y en tres plazos, pero hay que pagar. Yo creo que querrá quedarse porque él lo ha manifestado así con bastante reiteración. Él está contento aquí y a ver si es posible. A lo mejor resulta que luego hace una Eurocopa sensacional y entonces nos tenemos que olvidar de él, pero bueno. Haría falta que el jugador quiera quedarse y que a Osasuna le salgan las cuentas», alegaba.
Budimir, que el pasado verano forzó su salida de Son Moix para seguir jugando en Primera División, tiene contrato con el Mallorca hasta el año 2023 y si Osasuna no abona los ocho millones de la opción de compra antes de que finalice oficialmente la temporada deberá regresar a la disciplina balear. Esta temporada ha anotado once tantos con el conjunto navarro y en las próximas semanas disputará con Croacia la Eurocopa, que era otro de sus grandes objetivos, aunque antes de concentrarse con el combinado ajedrezado ya dejó claro que es «feliz» en Pamplona.