Diez jornadas sin perder, invicto e imbatido como visitante -un dato inigualable en el fútbol profesional-, con la sensación de mejorar cada mañana la versión del día anterior y una veintena de futbolistas con suficientes minutos en las piernas como para sentirse igual que el compañero...
Es el Mallorca (2º, 22 puntos) que ha trazado Luis García Plaza, con el primer cuarto ya encuadernado en el libro de la temporada y que esta tarde volverá a pasar una dura prueba en Montilivi. Las diez jornadas que acumula el grupo balear sin doblar la rodilla y la plaza de ascenso directo que amarró el pasado domingo dos años y dos meses después se ponen hoy en juego en un escenario de postín que no presencia un triunfo isleño desde hace... 80 años.
El Girona (12º, 15 puntos) acude al envite repleto de cicatrices. Entre selecciones, lesiones, sanciones y la COVID-19, Francisco apenas dispone de dieciséis futbolistas de la primera plantilla para intentar salir del atasco -acumula tres empates consecutivos- y recobrar el camino hacia el norte de la clasificación que tomó hace apenas un mes, cuando encadenó dos alegrías consecutivas (venció a Castellón y Cartagena) que amortiguaron las tres derrotas en las cinco primeras jornadas de competición. Sin Valery, Juanpe, Bernardo, Bárcena, Kébé, Muric ni Stuani -el máximo goleador del campeonato el curso pasado- y las dudas de Ramalho y Nahuel, el Girona rifará toda su suerte al talento del mallorquín Monchu y al acierto goleador de Sylla, que hace unos años dejó helado Son Moix con un gol en el minuto 89 que le dio el triunfo al Racing...
El Mallorca ha llegado a un momento que ni siquiera las ausencias de los internacionales preocupa en exceso. Obviamente que a LGP le gustaría contar con Valjent, Lago Junior y Baba -éste es baja por lesión- ya que el papel de Trajkovski sigue siendo residual y posiblemente se pueda ir en el mercado de invierno. Pero el técnico madrileño sabe que los suplentes, un término que este año apenas forma parte de la jerga del vestuario, darán el callo. Russo ha suplido con nota al internacional eslovaco, Ruiz de Galarreta se está afianzando como pivote gracias a su capacidad para crear y destruir y en bandas, tanto Mboula como Amath han demostrado que pueden cubrir la baja del marfileño.
Con estas premisas, la intención de dar otro golpe encima de la mesa y atrapar algún punto de Montilivi, el Real Mallorca quiere seguir sumando. Para ello, Luis García volverá a contar con un bloque competitivo y divertido de ver. Teniendo en cuenta que ahora los partidos se han espaciado más y hay siete días de separación, es probable que no remueva tanto las piezas y apueste básicamente por el grupo que goleó a la Ponferradina -después de sacudirse el dominio inicial de su enemigo- para alcanzar esa segunda plaza y presionar al Espanyol de Vicente Moreno, que este mediodía visita el Fernando Torres de Fuenlabrada con un colchón de cuatro puntos....
Es probable que LGP apueste por Manolo Reina, que no ha encajado ningún gol a domicilio, bajo los palos, Sastre, Russo, Raíllo y Cufré en la línea de cuatro, Galarreta y Sevilla en la sala de máquinas con Mboula y Antonio Sánchez por bandas -con el mallorquín más por dentro para dejar el carril a Braian-, el pichichi Dani Rodríguez como enganche y Cardona como principal referencia ofensiva.
El abanico de posibilidades que maneja el técnico son infinitas. Dispone de un amplio fondo de armario con tipos como Murilo, Amath, Febas y los ‘9' Abdón Prats y Alex Alegría para desatascar la situación. Precisamente la versatilidad y las diferentes opciones son algunas de las principales cualidades de un Mallorca que quiere superar con nota el arranque de un ciclo exigente. Porque después del Girona se medirá a un Sporting empatado a puntos y al que le arrebató la segunda plaza hace siete días.
«El Girona tiene jugadores para hacer daño»
Luis García, entrenador del Mallorca, está convencido de que su equipo tendrá que trabajar «mucho» para derrotar al Girona FC, un rival que tiene «jugadores para hacer daño», aseguró. «La clasificación es engañosa. Tienen un partido menos, y el Girona FC es uno de los equipos con mayor presupuesto. Han ganado al Leganés y empatado al Almería, así que tenemos que dar lo mejor de nosotros para ganar», dijo García. El Mallorca visitará Montilivi tras una racha de diez partidos seguidos sin perder e invicto tras cinco salidas que ha resuelto con dos victorias (Lugo y Alcorcón) y tres empates (Espanyol, Mirandés y Real Zaragoza) y su portería a cero. La importancia de los números, sin embargo, es relativa para el técnico madrileño. «Aún quedan 31 partidos por delante», remarcó. «Pasaremos por rachas buenas como ahora y otras menos buenas. Hay que mejorar y seguir creciendo sin perder lo que estamos haciendo. Tenemos un ADN claro. Estamos satisfechos con la actitud de los jugadores y la ambición que tienen», añadió. Con respecto a los próximos compromisos, espera un calendario complicado: «Tendremos poco descanso, aunque queremos seguir sumando. Todo lo que sea sumar te permitirá estar en esas posiciones de arriba, y en las últimas jornadas veremos dónde estamos», puntualizó.