Cuarenta y dos jornadas después, el Real Mallorca cierra las ventanas de la Liga 123 instalado en la quinta posición. En la temporada de su regreso a la categoría de plata, el conjunto bermellón ha firmado la mejor actuación desde el último descenso, hace ahora seis años, y peleará desde este jueves por acompañar a Osasuna y Granada y ascender a Primera División por la vía más larga, la de la promoción. Un desafío al que nunca se ha enfrentado bajo el formato actual que le exige ganar dos eliminatorias si desea recuperar el rango del que se desprendió en junio de 2013.
El Real Mallorca ha amarrado la quinta posición gracias al empate cosechado este sábado ante el Extremadura en el Francisco de la Hera de Almendralejo (0-0), en un partido marcado por la presencia de los futbolistas menos habituales. Entre ellos Sergio Buenacasa (titular) y Nikola Stojiljkovic (entró en el segundo tiempo para sustituir a Abdón Prats), que reaparecían después de sus lesiones, o Victor de Baunbag, que debutaba con el primer equipo en el segundo tiempo. La victoria del Deportivo contra el Córdoba (2-0) obligaba a los isleños a puntuar para mantener el quinto puesto y aunque el conjunto extremeño ha apretado tras el descanso, los baleares han alcanzado su objetivo.
Al ser el quinto clasificado, el Mallorca se enfrentará en el primero de los cruces al cuarto equipo de la tabla: el Albacete que dirige Luis Miguel Ramis. El partido de ida se jugará en Son Moix el próximo jueves (21.00 horas) y el de vuelta se escenificará en el Carlos Belmonte el domingo (19.00 horas). Si supera esa confrontación, el conjunto bermellón opositará al ascenso en otros 180 minutos de alto voltaje. También disputaría el encuentro de ida en Son Moix (jueves día 20, 21.00 horas) y la vuelta en el campo del vencedor de la otra eliminatoria del cuadro entre el Málaga y el Deportivo (domingo 23, 21.00 horas).
El Albacete es, sobre el papel, el peor rival con el que podía toparse de frente el Mallorca. O al menos, el que más dolores de cabeza la ha provocado durante el curso regular. De hecho es el único equipo del campeonato ante el que no ha sumado un solo punto en sus dos careos. El cuadro manchego fue el primero que abrió la caja fuerte de Son Moix. Visitó el estadio del Camí dels Reis durante el sector inicial de la liga (6ª jornada, 23 de septiembre) y se destapó como el primer visitante que clavaba en él la bandera. Se adelantó muy pronto (minuto 3) por medio de Rei Manaj y aprovechó muy bien las curvas de un partido especialmente accidentado para llevarlo a su esquina. La lesión de Xisco Campos al filo del descanso tras un golpe con el delantero de origen albanés descentró al conjunto isleño, que yo no recuperó el rumbo. Y menos aún después de la expulsión de Antonio Raíllo, justo a la vuelta del descanso. Cuando peor pintaban las cosas Lago Junior empataba el partido, pero casi sin tiempo para encontrar la estabilidad otros dos goles del exmallorquinista Torito Acuña le dejaron sin escapatorias (1-3).
La historia no fue muy distinta en el partido de la segunda vuelta, ya en suelo albaceteño (25ª jornada, 10 de febrero). Enfrascado en la peor racha de la campaña como visitante (cuando visitó el Carlos Belmonte venía de perder contra Sporting, Osasuna y Almería y de empatar en Cádiz), el Mallorca naufragó en el domicilio de los de Ramis. Un tanto de Jeremy Bela a los seis minutos y otro gol de penalti de Néstor Susaeta en el tiempo añadido (minuto 96) limitaban la velocidad de los bermellones, a los que les dejaban un extraño sabor de boca (2-0).
El choque entre baleares y manchegos recuerda al que ambos clubs protagonizaron en junio de 1993, en aquella promoción que cruzaba los caminos del tercer y el cuarto clasificado de Segunda con el 17º y el 18º de Primera. Dirigido entonces por Jaume Bauçà, el Mallorca perdió con claridad en el Lluís Sitjar (1-3) frente al Albacete de Víctor Espárrago, que se apoyó en los goles de Menéndez, Antonio y Pinilla para contrarrestar el de Goran Milojevic. En la vuelta los de rojo llegaron a fantasear con la remontada gracias a los tantos de Luis Delgado y Bogdanovic en la primera media hora, pero Antonio hizo reaccionar a su equipo, que acabó controlando la situación (1-2).