Errores individuales, un equipo con dos caras, derrota dolorosa, pérdida de control... Las ruedas de prensa del entrenador del Mallorca, sea quien sea, al final de cada partido son un calco casi siempre de la anterior. Ayer, con uno a cuatro, se acentuó el discurso del entrenador, pero el guión más o menos es similar. «No acabo de entender lo que ha sucedido. Hemos visto un equipo con dos caras bien diferentes. En el fútbol profesional los errores individuales te cuestan puntos y en quince minutos hemos perdido el partido. Es la derrota más dolorosa. El Tenerife sin hacer nada del otro mundo ha llegado cuatro veces y nos ha marcado cuatro goles», señaló el técnico mallorquinista.
El técnico dijo que sus futbolistas «son responsables y conscientes de lo que está en juego» y añadió: «Pero con esto no vale poque ha de ver la realidad cuando saltas al campo», subrayó. «Si en el descanso me dicen que al final voy a perder el partido por 1 a 4 me río de cualquiera. Por momentos el equipo juega bien y después se cae todo de golpe. No queda otra que levantarse. Todos debemos dar un paso adelante. Hacemos muchas cosas bien durante muchos minutos y no nos da. No se trata de hacerlo todo bonito sino todo bueno», declaró Olaizola. Respecto a su estado de ánimo dijo verse «capaz de sacar esto adelante» y que sus fuerzas «están intactas». «Se trata de corregir cosas que tienen que ver con la concentración y vivir el partido como en el primer tiempo», concluyó el técnico.