Utz Claassen ha pedido la Acción Social de Responsabilidad contra Llorenç Serra Ferrer y Jaume Cladera. El consejero y accionista alemán del Real Mallorca, según ha podido saber este periódico, comunicó esta decisión el pasado jueves, durante la reunión del consejo de administración de la SAD balear, e incluso sometió dicha propuesta a votación. Claassen se apoyó en varios motivos para hacer uso de una herramienta jurídica que tiene por objeto el resarcimiento a la sociedad por los daños directos que haya sufrido como consecuencia de la conducta ilícita y culpable de sus administradores en el ejercicio del cargo.
En este sentido, el accionista alemán justificó su decisión por el desvío significativo del gasto aprobado por el consejo de la temporada 2011-12. El desvío presupuestario, sin la autorización del órgano de gobierno, para esa misma campaña. Y las pérdidas significativas del resultado de explotación del curso anteriormente citado. Asimismo, Utz Claassen considera que ha existido un incumplimiento del plan de viabilidad e irregularidades en el apartado deportivo incluyendo los fichajes de jugadores y de integrantes del cuerpo técnico sin la aprobac+ión del consejo de administración. En este último capítulo, destaca las contrataciones de Gregorio Manzano, para sustituir a Joaquín Caparrós, y la reciente de José Luis Oltra, que dirigirá al equipo la próxima campaña en Segunda División.
Otro motivo por el cual el consejero germano pide la Acción Social de Responsabilidad es el pago injustificado e inadecuado al asesor jurídico de la entidad balear. Finalmente, Claassen expuso en el consejo, que también está investigando y estudiando para incluir en la Acción Social de Responsabilidad.
Cuando el accionista alemán solicitó esta petición, Julián Carnicero se dirigió a Serra Ferrer para explicarle que Claassen podía pedir esta acción pese a no figurar en el orden del día y que tenía derecho a realizar esa propuesta.
Entonces, el consejero alemán pidió una votación, que desembocó en tres resultados a favor (57.135 acciones representadas) y cuatro (65.442 acciones) en contra, Wizard (Serra Ferrer); el propio presidente en funciones a título personal; Tukis Invest y Tukis Producciones. Utz Claassen interpreta que Serra Ferrer no puede votarse porque le afecta y que, sin los votos que acumula el pobler personalmente (unos 9.000 títulos) la Acción Social de Responsabilidad contra Serra Ferrer y el expresidente Jaume Cladera había sido aceptada.
No obstante, es un aspecto que aún debe ser estudiado por los servicios jurídicos. Sin embargo también cabe la posibilidad de que Utz Claassen pueda impugnar la decisión y demandar personalmente a Serra y Cladera. En el acta del consejo de administración del pasado jueves, quedó reflejado oficialmente que si se interpreta que Serra Ferrer puede votarse a sí mismo, pese a que le afecta personalmente, el consejero y accionista alemán se reserva el derecho a demandar personalmente tanto al actual presidente en funciones como al anterior. Si esta Acción Social de Responsabilidad es aceptada, podría suponer el cese inmediato de Llorenç Serra Ferrer de sus funciones. Además los motivos que puso el consejero alemán sobre la mesa para realizar esta propuesta, tendrían un valor aproximado de entre 25 a 30 millones de euros, por los casos de Joaquín Caparrós, Gregorio Manzano y los fichajes, sin obtener la aprobación del consejo, de Marvin Ogunjimi o Alejandro Alfaro, entre otros.
Tanto Utz Claassen como Michael Bloom, que fueron consultados ayer por este diario, declinaron realizar declaraciones al respecto.