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El Mallorca se desploma en el Pizjuán

El jugador del Sevilla José Antonio Reyes (i) trata de escapar del israelí Tomer Hemed (d), del Mallorca, durante el partido de Liga que están disputando esta noche en el estadio Sánchez Pizjuán. | Efe

| Sevilla |

El Mallorca tiene una facilidad asombrosa para desconectarse. Para no vivir enchufado los noventa minutos. Al Sevilla le bastó con un arranque fuerte en el segundo tiempo y aprovechar otro error de marcaje en una acción a balón parado para facturar los tres puntos, poner rumbo a Europa y dejar a la escuadra balear con la miel en los labios en su deseo de facturar ya la permanencia. La distancia con la salvación es notable -ocho puntos-, pero convendría no bajar los brazos antes de tiempo. (3-1).

El Mallorca salió a verlas venir, ante un Sevilla que convirtió el primer acto en el monólogo. De hecho, todo el encuentro se jugó al ritmo que quiso el conjunto de Míchel, que encontró un aliado en Cáceres. Jesús Navas se divirtió ante el uruguayo y convirtió aquel carril en la principal fuente de ingresos de su equipo. Afortunadamente, los incendios que provocaba el lateral uruguayo eran apagados con solvencia con Aouate y su pareja de centrales.

Al cuarto de hora, Navas aprovechó la debilidad de su oponente para meterse hasta la cocina y encarar a Dudú. El meta evitó el gol con el hombro. Después llegaron ocasiones de Del Moral, Reyes, Trochowski y un pase de la muerte de Negredo que Reyes no llegó por poco. Todo cocinado a fuego lento por aquella orilla. Caparrós se dio cuenta y taponó la hemorragia con Alvaro, más sacrificado en tareas defensivas que ‘Chori'.

Al Mallorca cada vez le duraba menos el balón ante un enemigo que, sin hacer nada del otro mundo, ya miraba a los ojos de la victoria. Sin embargo, la mejor ocasión del primer acto fue isleña y llegó en la frontera del descanso. Pereira se fue de Luna con un sombrero y metió un pase de la muerte que acabó en Alvaro. Este fusiló al muñeco y Palop se encontró el cuero.

El descanso no alteró el guión, aunque sí algún protagonista. Caparrós retiró a Alvaro para meter en la arena a Nsue, un cambio que no provocó apenas variaciones. El Sevilla encontró más con menos y se apoyó en las acciones a balón parado para acorralar a Aouate. En un saque de esquina, Negredo se impulsó en el primer palo para peinar el balón y abrir la lata. ‘Capa' movió de nuevo el banquillo. Retiró a un insípido Castro por Hemed y el israelí perdonó un mano a mano ante Palop para empatar. Ahí se descosió el Mallorca y creció el Sevilla. Con el viento a favor, la escuadra de Míchel pasó por encima de su enemigo. Del Moral, ganando la espalda a los centrales, y Navas, tras una asistencia de Reyes, echaron el lazo al Lunes Santo, aunque todavía hubo tiempo para que Hemed firmara el gol del honor.

Ficha técnica:
3 - Sevilla FC: Palop; Coke, Fazio, Escudé, Luna; Jesús Navas, Medel, Trochowski (Rakitic, m.73), Reyes (Kanouté, m.69); Manu del Moral; Negredo (Deivid, m.88).

1 - Real Mallorca: Aouate; Chico, Nunes, Ramis, Cáceres; Martí, Tissone; Pereira, Álvaro (Nsue, m.46), Chori Castro (Hemed, m.57); Víctor (Alfaro, m.71).

Goles: 1-0, M.51: Negredo. 2-0, M.62: Manu del Moral. 3-0, M.68: Jesús Navas. 3-1, M.74: Hemed.

Árbitro: Miguel Ángel Pérez Lasa (Comité Vasco). Amonestó a los locales Trochowski (m.26), Coke (m.44) y Reyes (m.56), y a los visitantes Martí (m.20) y Álvaro (m.34).

Incidencias: Partido disputado en el estadio Ramón Sánchez Pizjuán ante unos 35.000 espectadores. Terreno de juego en regulares condiciones, con zonas con mucha agua que frenaban la circulación de la pelota, debido a la lluvia caída horas antes. A la salida, ambos equipos se adhirieron a la campaña de la FAO "El fútbol profesional contra el hambre".

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