Tres jornadas y dos derrotas después, algunos futbolistas del Mallorca empiezan a cansarse de las batallas internas que sacuden al club y de los debates acerca del rendimiento de la plantilla. Los comentarios sobre la falta de consistencia del grupo y, sobre todo, los reproches hacia su falta de munición han caído como una losa en un vestuario que trata de alzar la mirada a pesar de su deficitario inicio de campeonato. «Llevamos desde el primer día hablando de que hacen falta delanteros, de que el equipo no tiene gol», explicaba ayer Víctor Casadesús en plena resaca de la jornada. «Creo que no le estamos haciendo ningún bien al equipo. La prensa y nosotros mismos, que también hablamos, le estamos metiendo presión al equipo», argumentaba.
El delantero algaidí se siente afectado por las críticas que ha ido amontonando el Mallorca por ese colapso que padece de cintura para arriba y la polvareda que ha levantado en los alrededores de Son Moix. «Hablábamos de ello sin que hubiera empezado la Liga y no era necesario, porque hay muchos jugadores en la plantilla que el año pasado marcaron muchos goles, como Pereira, Castro o Emilio», explica el mallorquín. «Es verdad que falta Webó, pero aparte de él y De Guzman, el resto estamos aquí. Contra el Málaga no se crearon muchas ocasiones, pero contra el Betis sí. Y si se generan oportunidades, los goles acabarán llegando», recuerda.
Molesto
Sin embargo, lo que más irrita a Víctor es que temporada tras temporada se dude de aquellos jugadores que más tiempo acumulan en la caseta rojilla. «Cada año es igual, al menos desde que estoy en la plantilla. Siempre se habla más de lo que tiene que venir y de lo que hace falta que de lo que hay. Y ahora ya no podemos hacer nada, aunque la gente no esté contenta con el equipo que tenemos. Los que estamos aquí somos los que tenemos que sacar esto adelante y tanto la afición como los jugadores y el club debemos tirar hacia la misma dirección. Es pronto, pero si algún año bajamos lo haremos todos. Es algo que aquí no se hace bien. Tenemos que ir todos hacia el mismo sitio, pero aquí hay muchas guerras que no ayudan en nada», sentenciaba el canterano.
Siguiendo esa misma línea, el punta isleño también cree que el conflicto entre Serra Ferrer y Laudrup debe zanjarse cuanto antes por el bien colectivo: «Como ya dijo Aouate, son mayores y saben lo que tienen que hacer. Para nosotros sería mejor que se llevasen bien y que hablasen, aunque realmente no sé cómo se llevan, es cosa suya. Si es verdad lo que se dice, sería más positivo para todos que la relación fuera buena, aunque puedo entender perfectamente que haya personas que choquen».
Víctor, que hasta ahora tampoco ha disfrutado de demasiado protagonismo en esta primera parte de la campaña, sabe que vuelve a estar obligado a ganarse el sitio y afronta el desafío con resignación. «Se habla más de todo lo que tiene que venir que de lo que hay y a los que llevamos aquí más tiempo nos toca esperar y volver a ganarnos la confianza. Pero estoy acostumbrado. No estoy enfadado y asumo mi papel, lo que quiero es hacerme con un puesto».