Confirmada la marcha de Pierre Webó del Real Mallorca, el camerunés aseguró ayer en declaraciones al a página web del club, que todavía no ha asimilado que deja de ser jugador del Real Mallorca. El futbolista lleva cuatro años aquí y, pese a que su profesión le lleva a otro país, Pierre no olvida las temporadas que ha pasado en Son Moix y el buen trato que le ha dispensado la afición todo este tiempo. «He pasado en los últimos días momentos raros por toda esta situación, le decía a mi mujer que no asimilo todavía que me voy de Palma, llevo ya muchos años aquí y la gente me pedía allá donde iba que no me fuera, pero es mi profesión», comentó.
Webó insistió en el hecho de que se ha sentido muy bien tratado por los seguidores y siempre ha tratado de cumplir en el campo con ellos y con el club. «Sólo tengo palabras de agradecimiento, nunca me han dicho nada malo, me han respetado, desde el primer día en el amistoso contra el Bayern hasta el último partido de Liga contra el Atlético de Madrid, yo siempre traté de devolverlo en el campo haciendo mi trabajo y dando todo por el Mallorca. Mi familia y yo estamos muy a gusto aquí, y pensamos vivir en Mallorca en un futuro», manifestó el camerunés.
Devolver el trato
Sobre la nueva etapa que está a punto de empezar en el fútbol turco, el jugador internacional comentaba que desconoce las sensaciones que experimentará en otro país porque son casi diez años de militancia en la Liga española. «Desde 2003 estoy en España, no sé como me veré en otro sitio, espero que vaya bien. Quiero agradecer también a toda la gente del club su trato conmigo, desde los utilleros hasta las personas de la lavandería, los servicios médicos, a la gente de oficinas, a todo el mundo», manifestó Webó en el sitio web de la entidad mallorquinista. La marcha de Pierre se concretó el pasado viernes en una reunión que tuvo lugar en Palma entre el representante del futbolista, Paco Casal y el consejero delegado del Mallorca, Pedro Terrasa. Durante este encuentro, que se prolongó prácticamente durante todo el día, salvo un receso al mediodía, se concretó la salida del camerunés a turquía en una operación que se valoró en 1.250.000 euros.
El Mallorca no quería que la salida de uno de sus jugadores franquicia se solventara por la vía rápida y sin que el club de destino del camerunés abonara una cantidad razonable ya que se trataba del máximo goleador la pasada temporada.
La intención de Casal era la de salir con la carta de libertad, circunstancia a la que el Mallorca y concretamente Pedro Terrasa y Serra Ferrer se negaban en redondo.
El conflicto se había estancado y no se vislumbraba una solución fácil, pero al final las conversaciones fructificaron y el conflicto se cerró favorablemente para ambas partes. Ahora el Mallorca tiene la necesidad de fichar a un sustituto de Pierre y también a un mediapunta, que en este caso será la guinda de un proyecto que con el paso del tiempo se esta volviendo muy sólido.