La figura de Miquel Jaume Roig (1953-2021) sigue muy presente en la memoria colectiva del deporte mallorquín. Un año después de su triste pérdida, su legado permanece intacto de la mano de su proyecto más ilusionante. El Palma Futsal, junto a la Fundación a la que da nombre el carismático dirigente y fundador de la entidad con sede en Son Moix, sigue siendo un referente dentro del fútbol sala nacional y a escala social. Desde este jueves, una placa recuerda su figura y su labor en pro del deporte en Mallorca. Y lo hace en un escenario especial en su singladura, como es el Palau d'Esports de Ciutat. Allí se reunieron familiares, con sus hijos al frente; amigos, autoridades, colaboradores, patrocinadores y su gente -con José Tirado y Tomeu Quetglas al frente-, sus chicos... La plantilla del Palma Futsal al completo, el cuerpo técnico, sus compañeros directivos y representantes de otros clubes como el Palmer Palma, el Feníe Energía o el Real Mallorca quisieron sumarse al tributo a la inolvidable figura de Miquel Jaume.
Sentimiento
«La pasión de mi padre era el deporte», refería María, hija de Miquel Jaume y que junto a su hermano, Miquel, descubrió la placa en recuerdo a su progenitor, en presencia del alcalde de Ciutat, José Hila.
«No hay mayor homenaje que ver que su legado sigue igual un año después», proseguía María, que tuvo palabras para agradecer al Ajuntament de Palma «que le abriera las puertas en su día». Junto a José Hila, representantes institucionales presentaron sus respectos a la figura de Miquel Jaume.
Carles Gonyalons, Marga Portells, Miquel Bestard, Francisco Ducrós, Rafa Navarro y una larga lista de amigos no faltaron a su cita con Miquel, hacia quien tuvo palabras cargadas de emoción un José Tirado que pidió a las instituciones lo que el propio dirigente les hubiera solicitado también. «Seguid apoyando al deporte de élite y al Palma Futsal. Nosotros nos encargamos del resto», aseveró el director general del club, en uno de los momentos cumbres de un acto al que acudieron también representantes de los clubes que reciben el apoyo de la Fundació Miquel Jaume Palma Futsal, una de las últimas iniciativas impulsadas por el mandatario, cuya huella se mantiene intacta.