Tras muchos días en las alturas a la caza de un sueño que se vio frustrado en el tramo decisivo, la montañera mallorquina Antonia Bergas ha compartido a través de su página de Facebook sus sensaciones al no poder hollar la cima del Himlung Himal (7.126 metros), en la cordillera del Himalaya, además de su «indignación» hacia la agencia que gestionaba la expedición y su sherpa. «No ha podido ser. No me han dejado intentar coronar», comenzaba su relato la deportista de Llubí, que en unos días tiene previsto emprender viaje de vuelta hacia Mallorca.
Eso sí, según ha podido saber Ultima Hora, en la Agencia Satori Adventures, encargada de gestionar la expedición, han sorprendido las afirmaciones de Bergas en su cuenta de Facebook, defendiendo en todo momento la actuación de los sherpas y el equipo auxiliar de los montañeros, ofreciéndole incluso la oportunidad de volver a intentar la llegada a la cima en una segunda intentona, a lo que se negó la mallorquina.
De la misma manera, sostienen que Bergas no ha cumplido con una parte del pago de los importes pactados, dejando ver que todavía debe abonar a la agencia una cantidad económica pendiente, a la espera de subsanar unos problemas con la tarjeta de crédito que les notificó la propia montañera, que se comprometió a cumplir con todo lo acordado. Desde la agencia confían en poder hablar con Bergas una vez concluido su descenso y solventar este asunto, dejando abierta la puerta a dejar en manos de la administración nepalí o la policía el caso si no se llega a un acuerdo. De la misma manera, se insinúa la falta de preparación y la carencia de material de la deportista isleña a la hora de afronta una cima de más de siete mil metros en el Himalaya.
«Estaba siendo duro, pero lo estaba dando todo. Hay quien no ha hecho bien su trabajo. Y lo cobran bien», lamenta Bergas, que avanzó que seguirá relatando su aventura en las alturas a lo largo de los próximos días. El pasado fin de semana, unos problemas físicos y las difíciles condiciones climatológicas en la zona de la cima, a más de siete mil metros, pusieron fin a su objetivo, tal y cómo informó a sus familiares a lo largo de la mañana del domingo.
A la vez, Antonia explicaba que este martes ha descendido 1.700 metros «y he abandonado a parte del grupo de la expedición. La indignación me supera y necesitaba caminar en libertad. Querían que les esperara. Ahora sí que les tenía que esperar. En cambio, el planning de ascensión a medida de otros...», refería molesta la balear, quien tiene claro que «el tiempo pondrá a todos en su sitio».
Y dejó claro que lo volverá a intentar, pero con otro equipo y en mejores condiciones. «Ya caerá este 7.000, pero con una buena agencia y un buen sherpa, eso sí. Como corresponde a una primera ascensión a un siete mil», puntualizaba, señalando a los 'culpables' de su no ascensión a la cúspide del Himlung Himal, que la hubiera convertido en la primera mujer mallorquina documentada en ascender por encima de siete mil metros.
De la misma manera, recordó que necesitaba caminar y desfogarse «lejos de los numerosos peligros que había que sortear hora a hora en esas alturas. No es nada fácil, es más peligroso de lo que pensaba... Pero creo que he puesto mucho coraje y sentido común. Más incluso que mi sherpa. Es lo que hay, a veces...», continuaba Antonia Bergas, quien agradeció de nuevo el apoyo de todas las personas, empresas, colaboradores y patrocinadores que le permitido llegar hasta allí. Aunque tiene claro que no va a desistir.