Miquel Àngel Esteller se proclamó campeón de España Sub20 en la prueba de los 400 metros vallas, en el campeonato disputado este fin de semana en Torrent, Valencia. El atleta del Diana AC puso con su actuación una guinda de oro a su magnífica temporada, la primera como atleta de la categoría Sub20, demostrando que en absoluto le viene grande, y sí una gran proyección a nivel nacional. Después de proclamarse campeón en la prueba en liso en el nacional invernal (con 47.10, nuevo récord balear absoluto borrando una plusmarca que cumplía 40 años), el pupilo de Jaume M. Mulet llegó a Torrent dispuesto a extender ese reino a la modalidad con vallas.
Tras dominar su semifinal del sábado con cómodos 54.41, mejor tiempo de la ronda. Su vitola de favorito la confirmó en la final de ayer con una salida poderosa, que sólo osó enfrentar Mario Santín, tres calles a la derecha del mallorquín. Pero Esteller se mantuvo inaccesible y en la recta de meta abrió hueco, esta vez sin tropiezos en ninguna de las últimas vallas, hasta cruzar la meta en 52.26, nueva marca personal y plusmarca autonómica, mejorando los 52.99 que él mismo estableció en Granollers el pasado día 2.
Triple salto
La otra medalla de la delegación balear en Torrent llegó desde el pasillo de saltos. El menorquín Nicolás Vila, militante de la Universidad de Oviedo, mostró su mejor versión y la cúspide de la buena forma mostrada a lo largo de la temporada. En su segundo intento, el balear se fue hasta los 15,04 metros, marca personal y superando por primera vez los 15 metros, un brinco que le dio la medalla de bronce.
Otras dos actuaciones de los jóvenes illencs se quedaron a sólo un paso del podio. El sábado, el formenterense Marc Escandell, velocista del Siurell-Sa Sini, ilusionó con sus 10.77 de la primera ronda, marca personal y segundo crono de la serie, si bien por la tarde superó las semifinales con 10.98, y en la final firmó 10.83, cuarto a sólo una centésima del bronce. Similar situación vivió Inés Pascual, vallista mallorquina del Valencia Atletismo, quien firmó una actuación espléndida en primera ronda, marca personal con 14.25, y excelsa en semifinales, 13.97 (2º crono de la ronda cuando llegaba a la cita con 14.69). En la final regresó a notables 14.27, que no devalúan en absoluto su gran fin de semana, pero que le dejaron con el amargor de la medalla de chocolate.