La imagen de Tayla Harris, una jugadora de fútbol australiano, chutando el balón durante un partido ha generado una fuerte polémica en su país, al haberse producido a raíz de la publicación de la misma un gran número de comentarios ofensivos y degradantes que la deportista de élite calificó de «repulsivos» y provenientes de «gusanos cobardes»
La futbolista, que compagina esta actividad deportiva a nivel profesional con el boxeo, cree que ha sido objeto de abuso sexual por la gran cantidad de reacciones lesivas a la fotografía, en la que se la observa levantando la pierna muy alto, por encima de su cabeza.
Cuando patea así un hombre no suele ocurrir nada; no obstante al haberlo hecho ella han salido a la luz una ingente cantidad de comentarios sexistas y homófobos, según cuentan varios medios de ámbito nacional e internacional.
El machismo y la misoginia corrieron a raudales después de que el canal australiano Seven Channel, publicara la imagen. Al empezar la oleada de comentarios negativos este medio retiró su publicación, algo que enervó aún más a Harris, que consideró que los trolls estaban logrando precisamente lo que perseguían: influir en esta cuestión y dañar su nombre y su imagen.
Por eso, la propia futbolista tomó la iniciativa, y publicó en su perfil de Instagram la imagen con un comentario de advertencia a los machistas que la denigran: «Aquí estoy yo en el trabajo. Pensadlo antes de comentar, animales».