España y Holanda protagonizarán mañana viernes, en la primera jornada del grupo B del Mundial de Brasil 2014, su undécimo enfrentamiento, en un recorrido desde 1920, con el apelativo de la 'furia' y la plata olímpica en Amberes, hasta 2010, cuando 'La Roja' fue campeona del mundo en Johannesburgo.
De la intensidad, fortaleza e ímpetu que demostró en aquellos Juegos Olímpicos de los años 20, primero contra Suecia, cuando se dio forma a ese calificativo para realzar el coraje del equipo, y después con el segundo puesto tras ganar a Holanda, hasta la apoteosis del fútbol español, con un juego opuesto, asociado al toque bello e incontestable con el que conquistó el mundo en 2010, con el gol de Andrés Iniesta en el minuto 116 ante los 'oranje'.
1 de septiembre de 1920. «A mí, Sabino, el pelotón, que los arrollo». Clamó José María Belausteguigoitia en la segunda parte del encuentro frente a Suecia, que mandaba en el marcador con un gol de Dahl, en un partido de alto voltaje, en muchos momentos violento, cuando su compañero Sabino se preparaba para lanzar una falta.
La pelota fue al área y un increíble impacto la lanzó hacia la portería. Al balón, pero también al propio Belauste, al portero contrario y dos defensas rivales. Fue el 1-1. El 1-2, el de la victoria, lo marcó Acedo en el tramo final, el que impulsó a la 'furia' a una posterior y meritoria medalla de plata contra Holanda.
Después de vencer a Italia, un día después, por 2-0, y de que Checoslovaquia, en la final del día 2 de septiembre, se retirara frente a Bélgica, España se cruzó con la selección 'oranje' en un partido que la organización convirtió en definitivo para la segunda posición y que coronó a la selección española con la plata.
Venció por 3-1 a Holanda, con dos goles de Sesumaga y uno de Pichichi, en su primer enfrentamiento contra ese rival, con el que ya se ha medido en otras nueve ocasiones, la más reciente ya es imborrable en la memoria de España por mucho tiempo que pase, por más que aumente el palmarés de un grupo imponente en Sudáfrica 2010.
11 de julio de 2010 es una fecha que permanece escrita en mayúsculas en la historia de la selección española, como el minuto 116, en el que Andrés Iniesta, en la prórroga, de volea cruzada dentro del área, guió a España a su primer campeonato del mundo. Holanda perdió la final del torneo por tercera ocasión. Ese es el único precedente entre ambos en la fase final del Mundial, en el que ahora se reencuentran con un duelo directo, el del debut para los dos en Brasil 2014, el próximo viernes en Salvador de Bahía, y su undécimo enfrentamiento, con un balance favorable a la selección española de cinco triunfos por cuatro de su rival.