El Real Mallorca es como una larga película donde los giros inesperados se suceden a velocidad de vértigo y cuando todo parece encaminarse hacia una dirección, sucede algo que hace variar el rumbo de los acontecimientos y vuelve a sembrar de incertidumbre tanto la escena presente como las que dominarán la pantalla en los próximos cambios de plano. En estos momento Oltra sigue como entrenador, Serra Ferrer ha dimitito del cargo de director deportivo, aunque sigue siendo el máximo accionista, y Utz Claassen se mantiene a la expectativa. Los acontecimientos se fueron sucediendo ayer tarde de forma vertiginosa. A la una de la tarde, Utz Claassen llegó a Son Moix para reunirse con Serra Ferrer y acordar el nombre del sustituto de Oltra. No hubo acuerdo. El perfil presentado por el exdirector deportivo no era el deseado por Utz Claassen y a partir de ahí la situación se enquistó.
La falta de acuerdo por su sustituto desencadena la crisis
Tanto Serra como Claassen estaban de acuerdo en la marcha de Oltra, pero no así en su sustituto. Precisamente fue este punto el que acabó desencadenando la dimisión de Serra Ferrer como director deportivo. Si hace dos semanas el vicepresidente manifestó que no podía afirmar que el técnico dirigiría la equipo en Alcorcón, el pasado domingo a la conclusión del encuentro ante el Hércules apuntó que «ya había tomado una decisión» respecto al futuro del entrenador. Tras dirigir Oltra el entrenamiento del domingo, el técnico esperaba para ayer mismo la llamada del club para firmar su finiquito y acabar su singladura en el Mallorca. Esto no sucedió al no haber acuerdo en el nombre de su sustituto y la idea inicial de Serra se fue al traste. Ante este escenario, el director deportivo ha tomado la decisión de dimitir, pero todavía resta por conocer qué sucederá a partir de ahora.
UTZ CLAASSEN
Pide la convocatoria urgente de un consejo de administración
En estos momentos el Mallorca no tiene director deportivo y por lo tanto no existe una figura autorizada como tal para tomar decisiones de ámbito deportivo, como por ejemplo, destituir al entrenador y contratar a otro. Utz Claassen, que abandonó ayer Son Moix sin conocer la maniobra que tenía pensado llevar a cabo Serra, movió ficha con rapidez para solicitar la convocatoria de un consejo de administración en un plazo de 48 horas que permita poner coto a esta situación de inestabilidad.
Ultima Hora localizó al ejecutivo alemán a la conclusión del consejo para valorar la dimisión de Serra como director deportivo. «Esta decisión me ha sorprendido, pero la respeto. Los consejeros tenemos ahora la obligación de actuar con responsabilidad y con la máxima rapidez para desbloquear la situación generada por la dimisión del director deportivo del club.