El golfista estadounidense Phil Mickelson ha conquistado el Abierto Británico, tercer 'grande' de la temporada y que se ha disputado esta semana en el duro y rápido recorrido escocés de Muirfield, con lo que el zurdo de San Diego levanta su primera Jarra de Clarete y el que es su quinto 'major', un mes después de quedarse a las puertas por sexta vez de conquistar el US Open.
No era el mejor situado, a cinco golpes de la cabeza, pero un día más los 'greenes' de Muirfield sirvieron la batalla entre grandes nombres. El inglés Lee Westwood, exnúmero uno del mundo, que comenzaba el día con dos golpes de ventaja en el liderato, sucumbió a la presión del domingo y dejó escapar la opción de conquistar su primer título de 'Grand Slam'. Mickelson fue el mejor, domó y manejó su 'putt' con maestría para firmar una tarjeta de cinco bajo par y un total de menos tres, con cuatro 'birdies' en los últimos seis hoyos.
Si hace un mes Merion devoró a todos los golfistas, entre ellos un Mickelson que llegaba al domingo con el liderato bajo el brazo, en Muirfield solo 'Lefty' terminó bajo el par. El norteamericano, que venía de su primera victoria en las islas británicas el domingo pasado precisamente en el Abierto de Escocia, sacó tres golpes de ventaja al sueco Henrik Stenson, segundo.
Mientras, en uno sobre par acabaron un cabizbajo Westwood, un increíble Ian Poulter y un ganador de un 'major' este año Adam Scott. Por su parte, el número uno del mundo, Tiger Woods, terminó en sexta posición y alargó a 21 los 'grandes' que han pasado sin hincarle el diente a ninguno. Una última jornada irregular, le dejó una vez más sin opciones de acercarse a los 18 títulos de Jack Nicklaus.