El serbio Novak Djokovic y el británico Andy Murray disputarán mañana la final del Masters 1.000 de Shanghái tras demoler las fuerzas del checo Tomas Berdych y del suizo Roger Federer, respectivamente, para repetir la última final de Flushing Meadows, donde el escocés ganó su primer Grand Slam.
Djokovic fulminó a Berdych por 6-3 y 6-4 en 85 minutos para alcanzar por primera vez la final de este torneo, mientras Murray, ganador en los dos últimos años, sentenció a Federer por 6-4 y 6-4, en 98 minutos en una repetición de las recientes finales de Wimbledon y de los Juegos Olímpicos de Londres.
El gran resto de Murray fue clave en la décima victoria sobre Federer (10-8 en total y 6-1 en Masters 1.000) en uno de los clásicos de este deporte. El escocés siempre ha jugado bien en la parte final de año, pero esta vez se ha presentado en Shanghái con una agresividad que le faltaba, quizás porque ha ganado en confianza tras obtener su primer grande en Nueva York.
En ese resto, profundo y demoledor para tomar la iniciativa, basó el de Dunblane su estrategia para robar tres veces el servicio al número uno del mundo después de disponer de once ocasiones. Federer cometió cinco dobles faltas, algunas de ellas en momentos clave como en el quinto juego del segundo parcial, y 33 errores no forzados.
El partido fue interrumpido por la lluvia con 5-4 para Murray y servicio en el segundo set. Y el techo retráctil del Estadio Qi Zhong cerró sus ocho planchas en forma de hojas de la flor de loto, por primera vez en esta edición. La fuerte lluvia obligó a que una bandada de 30 operarios saltaran a la pista para secarla mientras los jugadores se habían retirado a los vestuarios.
Después de 35 minutos de espera, Murray sirvió para ganar el partido y lo hizo con acierto para aumentar su récord en la capital económica china con todo victorias, 12. Su triunfo sobre Federer protegerá al español Rafael Nadal que comparte con el suizo el récord de títulos de Masters 1.000 con empate a 21.
Antes, en una poderosa demostración de fuerza y definición en sus golpes, el campeón del Abierto de Australia obtuvo su décima victoria ante Berdych, 9-0 en pista dura, en una hora y 26 minutos.
Ganador de la Copa Masters en la edición de 2008 que se disputó también en el Estadio Qi Zhong (derrotó entonces al ruso Nikolay Davydenko en la final) «Nole», ha alcanzado la última instancia sin ceder un solo set.
El duelo tuvo intercambios para enmarcar, con un insultante dominio de Djokovic que apenas dio margen al checo en los 20 primeros minutos hasta situarse con 5-1. Pero justo cuando Djokovic se disponía a apuntillar el encuentro en la primera bola de set, cometió una doble falta y Tomas logró después la única rotura en su casilla.
Le duró poco la alegría al jugador checo que entregó el primer parcial en 43 minutos después de haber dispuesto de una bola de rotura en el noveno juego.
En el segundo Djokovic volvió a romper en el tercer juego y esta ventaja le fue suficiente para lograr la victoria a la primera oportunidad, con un punto de saque. El serbio acabó con cinco «aces», 25 golpes ganadores y solo 19 errores no forzados.
«Es el mejor restador del circuito y sus movimientos en la pista son increíbles. Esas dos cosas son mucho para mi juego», admitió el derrotado Berdych.
«Me gusta jugar agresivo y hacer que los otros corran, pero eso a él no le perjudica mucho. Es el segundo jugador del mundo, intentando ser el primero. Ahora mismo es difícil encontrar la forma de ganarle y tener un récord positivo contra él», añadió el checo.
Semifinalista en dos ocasiones, en 2009 ante Andy Murray, y 2011 contra Roger Federer, el jugador serbio había dejando antes en el camino al búlgaro Grigor Dimitrov, al español Feliciano López y al alemán Tommy Haas.
Y ahora se enfrentará contra Murray, en busca del quinto título de la temporada, y tras sumar la victoria 69 del año. «Estoy preparado para mañana con cualquiera que me toque», dijo Djokovic antes de saber quien sería su rival.
«Es algo más agresivo, eso se nota en la pista. Golpea más de derecha, que no era lo mejor antes. Este año ha mejorado ese golpe y tiene más confianza sobre la pista, cree más en si mismo. Y de ahí han llegado los resultados. Ha ganado un Grand Slam», señaló el serbio sobre Murray, recordando como el escocés le ha ganado en las dos últimas ocasiones, en las semifinales de los Juegos Olímpicos y en la final del Abierto de los Estados Unidos.
«No creo en la palabra venganza, nunca me gusta la venganza. Solo juego al tenis y trato de ganar cada partido que disputo», dijo Djokovic, que luchará por su título número 13 de un torneo Masters 1.000.