El Mallorca continúa trabajando para darle forma a su nueva plantilla. Y aunque el vestuario precisa una reforma notable que afectará a todas las parcelas del campo, casi todas sus fuerzas se centran ahora en la búsqueda de pólvora para el ataque. En ese sentido, el club balear recibió ayer el guiño de un viejo conocido, Dani Güiza, que reiteró su deseo de volver a la Isla para engordar una tarjeta de visita que alcanzó en Son Moix sus máximas cotas. Mientras tanto, la opción de Diego Costa, una de la preferidas por la propiedad, parece complicarse. El futuro del delantero del Atlético dependerá en principio de lo que decida el próximo entrenador rojiblanco, aunque en la entidad isleña temen que el futuro del brasileño podría estar en Turquía.
En el caso de Güiza, su idilio con el Mallorca ha continuado desde que abandonó la capital balear en 2008. Su falta de fortuna en Estambul y su distanciamiento con la hinchada del Fenerbahce le han impedido apartar la mirada del fútbol español, al que sueña con regresar cuanto antes. Se le relacionó en su día con el Hércules y, más recientemente con el Málaga, aunque él sigue guardándole un cariño especial al conjunto de Son Moix, con el que se erigió en su día en el máximo goleador de la Liga.
El jerezano, que aprovecha cualquier ocasión para lanzar mensajes a los dirigentes isleños, recordó ayer en los micrófonos de Onda Cero Mallorca que estaría encantado de volver a vestir de rojo la temporada. «Ya no sé cómo lo tengo que decir», subrayaba. El Mallorca, por su parte, no vería con malos ojos su vuelta. De hecho, ya se dirigió al Fenerbahce durante la campaña anterior, aunque el club otomano rechazó esa posibilidad. En el Iberostar Estadi consideran que el andaluz sería una opción interesante para ilustrar la parcela ofensiva, pero al mismo tiempo admiten que existen un puñado de interrogantes que convendría despejar antes de plantearse seriamente el fichaje. Desde el salario que percibiría durante el tiempo que jugara en la Isla (cuenta con una ficha inaccesible ahora mismo), a su estado físico, ya que una lesión en el tendón de Aquiles le tuvo en el dique seco durante muchos meses. Si el jugador consigue forzar una cesión y rebaja sus pretensiones, la vuelta podría estar al alcance.
Posibilidades
La alternativa de Diego Costa, en cambio, parece haberse puesto cuesta arriba en las últimas horas. El Atlético de Madrid sigue buscando entrenador (el nombre de Gregorio Manzano sigue ganando peso) y el club colchonero, que necesita aligerar su plantel, pretende hacer caja con su traspaso. En esa dirección, el fútbol turco podría ser su destino, lo que obligaría al Mallorca a seguir peinando el bazar futbolístico en busca de otras soluciones para el ataque.