La jornada de descanso ha supuesto un alivio para Joan Horrach. La Vuelta a España vuelve hoy a la carretera con el trayecto entre Tarragona y Vilanova i la Geltrú (175 km.) tras dejar atrás una primera semana cargada de espectáculo. No obstante la emoción del espectador implica sufrimiento para el que da pedales. La dureza del recorrido y el calor asfixiante han propiciado que el corredor de Deià no dude en calificar la cita como «la más dura» de su carrera, aunque ahora el mejor aliciente es el gran momento de forma su jefe de filas en el Katusha, Joaquim 'Purito' Rodríguez, (2º con el mismo tiempo que el líder).
«La gente me dice que no nos movemos, pero el calor ha hecho mucho daño. No es que vayamos parados es que todos estamos muy cansados», explica el mallorquín, que también resalta que «el recorrido está siendo muy diferente a otros años y especialmente duro, el más duro de mi carrera».
Esfuerzo
Su trabajo es «hacer los esfuerzos que hay que quitarle de encima a 'Purito'» y arroparle ahora que se avecinan etapas propicias. Pese al cansancio, Horrach se confiesa «muy motivado» ante el reto de apoyar a uno de los grandes aspirantes al maillot rojo. Además, también añade que «algunos favoritos como Menchov han quedado lejos, pero aún no se puede descartar a nadie. 'Purito' es ahora el que lo tiene mejor y el equipo está muy fuerte».
El nivel demostrado por el Katusha complica ver al de Deià en la lucha por un triunfo parcial. «Los demás equipos nos vigilan mucho y no nos dan opciones, así que habrá que estar en las escapadas por motivos tácticos», asegura el mallorquín, que tras siete presencias en la ronda ha extendido su compromiso con la escuadra rusa para seguir entre los mejores de un pelotón.