REAL MADRID 90
DKV JOVENTUT 82
REAL MADRID (23+28+16+23): Pablo Prigion(2), Marko Jaric (26), Kaukenas (4), Garbajosa (9) y D. Lavrinovic (2) -cinco inicial- Tomic (-), F. Reyes (10), T. Hansen (8), N. Velickovic (-) y Llull (29).
DKV JOVENTUT (20+19+19+24): K. Valters (7), C. Tucker (14), Pere Tomás (8), L. Bogdanovic (16) y A. Koffi (4) -cinco inicial- Norel (3), M. Fernández (4), A. Bueno (-), Franch (2), Jelinek (8), Sonseca (9) y Eyenga (8).
Àrbitros: Arteaga, Pérez Pizarro y Conde. Sin eliminados
Marko Jaric y Sergi Llull han impulsado al Real Madrid hacia las semifinales de la Copa del Rey con actuaciones espectaculares que han quebrado la resistencia de un animoso DKV Joventut derrotado dignamente, pero con claridad, por 90-82.
Los polivalentes jugadores exteriores blancos han finalizado con 55 puntos anotados (26 el serbio y 29 el menorquín) y 63 de valoración (34 y 29, respectivamente). Es decir, prácticamente con las dos terceras partes de la labor numérica final de su equipo.
De todos modos, ha sido el base-escolta-alero balcánico el que más incidencia ha tenido en el partido ya que toda su labor la realizó mientras el encuentro estaba vivo. Llull también ayudó en momentos importantes, pero explotó su estadística con 16 puntos en el último cuarto, cuando la Penya lo tenía casi imposible.
No obstante, por encima de las individualidades, el Madrid -sin que Bullock ni Vidal llegasen a jugar- ha sido mejor que un Joventut que ha tirado de canteranos (el mallorquín Pere Tomás, Jelinek, Franch, Eyenga) para intentar equilibrar un choque desigual.
No estuvieron mucho mejor que los jóvenes Clay Tucker y Luka Bogdanovic (3/15 en triples entre los dos), pero si acabaron como máximos anotadores verdinegros (16 y 14 puntos).
Empezó mandando el Real Madrid (7-2) con un par de canastas de Garbajosa, pero el partido se fue igualando durante la primera mitad, con Bogdanovic, Valters y Pere Tomás aguantando el ritmo anotador que exigía Jaric, el mejor jugador del primer cuarto con 11 puntos sin fallo y 14 de valoración.
Anulada la primera fuga de los de Etore Messina, el choque se igualó (11-11 16-16, 21-20) hasta el 25-25, tras acabarse los diez primeros minutos 23-20.
Ahí, ya comenzado el segundo cuarto, se inició la definitiva escapada blanca con un 9-0 que llevó el marcador a un 34-25 que avanzaba tormenta para los verdinegros, que aún se verían 13 y 14 puntos abajo (42-39, 51-47) antes de llegar al descanso 51-39.
Jaric (16 puntos y 21 de valoración al descanso) seguía lo suyo y además encontraba más aliados en Hansen, Llull y Reyes. Sonseca aguantaba de los suyos peleando en la pintura, pero el futuro se tornaba negro para el Joventut en la segunda mitad.
Y así fue, porque el Madrid seguía abriendo hueco hasta alcanzar los 16 puntos de ventaja (60-43). Volvió a la carga el base-escolta-alero serbio en el último cuarto hasta el punto de ensombrecer el impresionante partido de Fernando San Emeterio de un rato antes. Aunque volvió después, cuando se sentó sin haberse llegado a la mitad del último cuarto estaba todo hecho. Le cogió entonces Llull el testigo y dio un recital hasta el final del choque.