Paquita Ferragut acaba de publicar su segunda novela, Vivir soñando. Forma parte de una trilogía cuyo primer volumen fue publicado hace un par de años y el tercero ya está escrito. Lo más especial no es que comenzara a escribir estas novelas con sólo quince años (ahora tiene treinta), sino que Paquita sufre una minusvalía física del 89%. Pero, como ella misma explica, «escribir me sirve para aprender, y así puedo hablar y vivir mucho mejor».
Ferragut apunta que le costó terminar el primer volumen por sus dificultades para hablar. El segundo, «no tanto. He mejorado bastante porque ahora las palabras me salen más fácilmente». La trilogía comienza con la historia de dos hermanas, una adolescente y un bebé de ocho meses, que «no se sostiene, y su familia debe acudir al médico». La inspiración autobiográfica es confesa: «Si me conoces bien, sabes que hablo de mí, pero la historia está disfrazada. Hablo de mí a través de algo inventado», explica. En el nuevo libro hay sexualidad, sida, «chulos y putas. También escribo sobre el embarazo y las dificultades que trae a los jóvenes».
Para conseguir «el título de escritora», Ferragut se ha apuntado a un curso de escritura por Internet, llamado El arte de escribir. «No sé si lo voy a terminar, porque me aburro. Me explica cosas que ya sé». Hasta los catorce años, Paquita estudió en un colegio «especial» para personas con discapacidad. Al cumplir los catorce, le dijo a su madre que «no me gustaba ese colegio porque no me enseñaban. Mi mente había llegado al máximo y yo necesitaba un cambio». El paso a una centro 'regular' fue «brutal. No estaba acostumbrada, pero mejoré mucho».
Cuando era pequeña pintaba en el suelo con la boca. De hecho, quedó primera de España en un concurso de esta técnica. Con el mismo sistema comenzó a escribir. Después, el primer libro lo escribió con Iconio, un casco con un largo puntero con el que apretaba las teclas del ordenador. Posteriormente, cambió a otra herramienta más moderna, llamada Naturpoint: «Se coloca como un piercing en la nariz y se teclea sobre un teclado virtual. Es mucho más rápido». Antes tardaba hasta cinco horas para escribir una página de Word y ahora lo hace en unos 30 minutos. Su próximo «sueño» es llevar la trilogía al teatro en formato de musical.
Vivir soñando se vende, entre otros puntos de distribución, en El Corte Inglés. No fue el caso de Una noche de locura, el primer tomo. Ferragut vendió los 1.800 ejemplares recorriendo Palma y la Part Forana con su cuidadora. «Me iba a Santa Maria, Binissalem, Sineu... Íbamos por la calle a buscar gente y a vender. No me daba vergüenza». Al contrario, le daba más coraje. Algo que nunca le ha faltado.