Con la sonrisa dibujada en el rostro y una autoestima a prueba de bombas, los jugadores del Mallorca celebraron el punto atrapado en el Calderón como si se tratara de una victoria. Los bermellones, que jugaron en inferioridad durante más de una hora y con dos hombres menos casi todo el segundo tiempo, evitaron una caída cantada y avivaron el fuego que asola el Vicente Calderón desde hace ya algunas semanas.
Uno de los efectivos más felices del grupo era precisamente el autor de la igualada, Borja Valero, que festejó un resultado que refuerza la moral del vestuario. «Esto nos ayudará a afrontar el partido de Copa con mucha más tranquilidad. La verdad es que han pasado muchas cosas y que estamos muy cansados, pero la alegría por el gol del empate es enorme», señalaba el mediapunta. El de Hortaleza no se olvidó de la actuación del colegiado y recordó que no era «normal» que los baleares acabaran con nueve «porque no ha habido faltas graves». «A veces te perjudican y otras te ayudan, pero hay que hablar mucho de los árbitros. Quizás daba rabia que el colegiado sea tan determinante en el partido, pero nos vamos muy contentos por lo que ha pasado», apuntaba. Además, Valero recordaba la tensión del ambiente y destacaba que el Atlético no hubiera «llevado el partido a su terreno».
Aouate, por su parte, fue un poco más allá con respecto al colegiado y señaló que «el segundo penalti no debería haberlo pitado». Según el israelí, el equipo demostró «un carácter y una actitud» que permitieron que el Mallorca se fuera «con un premio importante».
Gonzalo Castro alabó el «esfuerzo, el trabajo físico y la respuesta» del conjunto bermellón. «Parecía que el Atlético nos iba a pasar por encima, aunque con trabajo y sacrificio sabemos que podemos llegar lejos», destacaba. Nunes, en cambio, insistía en la capacidad de lucha del vestuario y felicitaba públicamente a sus compañeros por la gesta: «Estamos todos de enhorabuena porque hemos trabajado un montón y hemos demostrado que tenemos mucho corazón y confianza para seguir peleando en la Copa».