La selección española de baloncesto afronta con ambición y con ganas de sacarse la espina de lo ocurrido hace dos años en Madrid, el Eurobasket 2009, que dará comienzo hoy en tierras polacas, donde la campeona del mundo es la máxima favorita para llevarse el cetro continental.
España aspira al oro y es la única presea que quieren colgarse, tras la amarga plata de hace dos años y que todos quieren olvidar y pasar página con un título continental y seguir haciendo historia con la mejor generación del basket nacional.
Un nuevo proyecto, con nuevas caras, pero con la misma sensación: la unión y complicidad del grupo, que ya se vio en el Mundial de 2006.
Sergio Scariolo, que se convierte en el segundo entrenador extranjero después de que de 1951 a 1952 llevara las riendas de España Michael Rutzgis, preparador lituano, pero nacionalizado estadounidense, es el artífice de este nuevo proyecto donde las lesiones le han obligado a cambiar piezas para conformar un bloque de garantías.
Así, España se queda huérfana sin su gran capitán Carlos Jiménez, que se despidió con la plata olímpica en Pekín, y sin los lesionados José Manuel Calderón y Berni Rodríguez, pero sus huecos han sido ocupados por jugadores de garantía como Carlos Cabezas, que regresa al equipo o el menorquín Sergi Llull, uno de los nuevos junto a Víctor Claver.
Un bloque donde finalmente sí está Pau Gasol. El de Sant Boi, que ponía en duda su presencia durante la temporada, hacía historia ganando el anillo de la NBA con sus Lakers y sueña con cerrar la temporada con un oro continental, que le falta en su ya laureado palmarés.
Junto a él otros de los fijos como su amigo Juan Carlos Navarro, que se estrena como capitán, compartiendo responsabilidad con un Jorge Garbajosa, que llega sin problemas a la cita, a un equipo al que se une un cada vez más experimentado Marc Gasol, Felipe Reyes, el mallorquín Rudy Fernández o Raúl López, completando el grupo Ricky Rubio, llamado a deslumbrar con su juego y que vuelve a ser el jugador más joven de la competición.
España se presenta en suelo polaco como el rival a batir, tras sus últimas apariciones internacionales aunque tras una preparación inmaculada la derrota ante Lituania en Vilnus no le ha quitado su cartel de favorito para el Europeo.
Un toque de atención fue lo ocurrido en tierras lituanas, que esperan que sirva de acicate para el inicio de la competición hoy (21.00 horas, La Sexta) ante Serbia, un duro rival que llega con numerosas caras nuevas y sin jugadores de la talla de Rakocevic, Milicic o Vujanic, entre otros.
Tras el estreno con Serbia, a los de Sergio Scariolo les espera la novedosa Gran Bretaña, que busca confeccionar un equipo de cara a la cita olímpica de 2012 y que cuentan con la presencia de Pops Mensah-Bonsu y con las ausencias de Luol Deng y Ben Gordon
Cerrando esa fase ante Eslovenia, el principal rival de España en esta ronda, que se presenta en Polonia con un gran grupo de jugadores, a pesar de la ausencia de Becirovic, con ganas de luchar por los metales. Los Lorbek, Smodis, que está tocado y es duda de última hora, Lakovic y con la baja de última hora del NBA Beno Udrih, quieren demostrar su calidad, después de que sus últimas apariciones internacionales no hayan sido buenas, y teniendo en mente lo ocurrido hace dos años cuando perdieron en Madrid sus opciones de meterse en semifinales.
Un Europeo mermado por la ausencia de figuras del baloncesto internacional como Dirk Nowitzki, Andrei Kirilenko, Saras Jasikevicius, Ramunas Siskauskas o Theo Papaloukas deja abierto las opciones de lucha por el título, donde España se presenta como favorita. Sin embargo, Lituania se presenta con un renovado equipo con importantes ausencias, pero con hambre de títulos y liderados por Kleiza buscarán mejorar el bronce logrado hace dos años.
También habrá que estar pendientes de combinados como Croacia, que llega sin presión a Polonia y que cuenta con un viejo conocido de la ACB, Roko Leni Ukic en su mejor momento y que intentará dirigir a los suyos a conseguir un metal y romper los 14 años de sequía, sobre todo con la mente puesta ya en su Mundial.
Por su parte, el base de los Spurs de San Antonio Tony Parker llega al frente de Francia, la más rodada de la competición, tras haber sellado su billete a Polonia hace unas semanas. Mientras que una incógnita será el hacer de la vigente campeona. Rusia, que pondrá en juego el cetro conseguido hace dos años, se presenta muy remozada. Khryapa, Monya, Bykov y Ponkrashov son los únicos supervivientes de la final de Madrid, ya que ni Andrei Kirilenko, MVP, o J.R.Holden, el héroe de la final, estarán con Rusia en la defensa del título.