Agencias|CINCINNATI
Haber llegado a las semifinales del Masters 1000 de Cincinnati sobrepasó las expectativas del tenista mallorquín Rafael Nadal en su regreso a la acción después de una larga inactividad. El manacorí fue derrotado por 6-1 y 6-4 a manos del cuarto cabeza de serie, Novak Djokovic, pero admitió que vencer al serbio habría sido «ir demasiado lejos» tras su vuelta a las canchas. En Cincinnati, Nadal hizo su segunda aparición en un torneo después de dos meses de baja a causa de una lesión de rodilla.
Por eso, Nadal destacó que haber llegado a cuartos de final en Montreal la semana pasada y a semifinales en Cincinnati era mucho más de lo que había esperado con vistas al Abierto de Estados Unidos, que empieza el 31 de agosto. «Esta semana es muy importante para mí. Ganar cinco partidos y jugar siete en total es suficiente, creo», declaró a los periodistas. «Estoy contento por todo. Contento por estar aquí y contento de estar más preparado para el Abierto de Estados Unidos de lo que esperaba antes de venir a esta gira estadounidense», admitió el balear.
Nadal no jugó mejor que Djokovic, pero el mallorquín dijo que su seguridad no se vería afectada en adelante. «Es otro paso. Física y mentalmente es difícil para mí estar listo. Pero creo que este partido va a ser una buena experiencia para intentar dar ese paso en el Abierto de Estados Unidos», sostuvo. «Creo que no estaba al cien por cien para jugar a este nivel. Tengo que jugar más de una vez a este nivel para estar preparado para competir», explicó. La tendinitis en ambas rodillas que impidió que Nadal pudiese defender su título de Wimbledon ya ha mejorado, y el actual número tres del mundo señaló que ya juega sin dolor.