Alfonso Gil|PRETORIA
La selección brasileña se dio un festín en la primera parte de su partido ante Italia y aseguró la primera posición del grupo con tres goles en ocho minutos que, además, en función del marcador del Egipto-Estados Unidos, dejó al equipo italiano fuera de la competición.
Brasil fue más que Italia en el conjunto del encuentro y sólo bajó el pistón tras el descanso, lo que permitió que la campeona del mundo mejorara ligeramente, pero sin convicción en sus acciones ofensivas.
Fue un partido intenso en sus primeros minutos, aunque controlado por Brasil, que dispuso de las mejores ocasiones de gol a partir del balón enviado al poste por Ramires a los siete minutos de juego.
Italia no conseguía que el balón llegara a sus delanteros. Ni Luca Toni, ni Iaquinta, que fue sustituido antes del descanso, tuvieron opciones.
Con espacios a la contra ante una selección italiana indolente, los brasileños estrenaron el marcador a ocho minutos del descanso, pero se fueron al vestuario con tres goles de ventaja.
Luis Fabiano en dos acciones de calidad del equipo brasileño y Dossena, en propia meta, en una acción de mucho peligro del equipo brasileño, habían reventado el partido con todo el segundo tiempo por delante.
Tras el descanso, el partido fue de ida y vuelta, con ataques ante ambas porterías.