Agencias|PRETORIA
Brasil se impuso ayer con solvencia (3-0) a la de Estados Unidos certificando sin problemas su clasificación para las semifinales de la cita sudafricana. Ante un rival que nunca creó peligro, apenas tuvo ocasiones y que de nuevo se quedó con diez, Brasil pudo haber hecho más sangre, pero se guardó goles y jugadores para próximos envites.
Después de la apurada victoria (4-3) ante Egipto, la pentacampeona del mundo, dispuesta a ofrecer una mejor versión, saltó al césped con mucho brío y con un Kaká de nuevo brillante, creando inquietud en la zaga estadounidense desde los primeros minutos.
Sin embargo, y pese a la superioridad manifiesta de la 'canarinha', los dos primeros goles llegaron uno a balón parado y el otro tras un error garrafal de los norteamericanos. Así una falta botada por Maicon directa a la cabeza del ex mallorquinista Felipe Melo significaba el 0-1 a los siete minutos.
Las oleadas se sucedieron, pero el segundo llegó tras un gran fallo de Beasley, que perdió el balón al borde de su área tras el saque de un corner en corto y Ramires recibió el balón, protagonizó una excepcional galopada y cedió a Robinho para que marcara a placer.
De nuevo Kaká, tras un gran eslalon desde el centro del campo pudo hacer el tercero, pero su disparo se fue fuera ante la salida del portero Tim Howard, que salvó también el resto de ocasiones brasileñas.
Tras el descanso, Estados Unidos se quedó en inferioridad y Maicon cerró el partido con un golazo de vaselina.