La gran fiesta del Renn Arena, culminada con una exhibición que enamoró a los miles de aficionados que se citaron en el trazado de Llucmajor, puso fin a la quinta edición del Rally Clásico Isla de Mallorca, que ha dejado patente el dominio de los Porsche, ganadores en regularidad y competición, y sitúa en lo más alto a An Der Heiden y Witt (Porsche Carrera RSR) en esta última modalidad, y a Ramírez Monsonis y Beltrán (Porsche 911 2.4) en la regularidad, después de una última jornada que dejaba pocas cosas en el aire después de dos jornadas de rodaje por las carreteras isleñas.
An Der Heiden, que corrió en 2009 con el vehículo anteriormente en posesión de Michael Eschman, totalizó un tiempo e 1:21:43, veintidós segundos menos que Stoschek y Hawranke (Porsche 911), mientras que el equipo Sheldon/Sheldon mantuvo el tercer puesto, dejando a las puertas del podio a los aspirantes Dameto y Fluxà, campeones de España de rally clásico, que con su Ford Escort RS 1800 concluyeron la prueba mallorquina con un tiempo final de 1:24:25. Galiana y Flores no tuvieron suerte en el apoteósico cierre del rally balear, acabando octavos en la general de competición, con un crono final de 1:30:01.
En lo que a la regularidad se refiere, Ramírez Monsonis y Beltrán (Porsche 911 2.4) dieron la vuelta a la clasificación para acumular 337 puntos que les llevaon a situarse en la cúspide de la tabla, relegando al segundo lugar a Verano y Casado (Lancia Fulvia HF), que acabaron con 344. Menden y Schmidt (Porsche 550 Spyder) también dieron el golpe, siendo terceros -391 puntos-, con lo que Izquierdo y Hernández (Lotus Elan) se veían precipitados a la cuarta plaza (409 puntos). Zorrilla y Piñeiro (Porsche 911) completaron las plazas de privilegio en regularidad, como previo de la exhibición final, que precedió a la entrega de premios y la cena de gala que pone punto y final a un Rally Clásico que ha explotado en 2009 y se consolida como una cita de entidad.