El atleta pobler, Miquel Capó Soler, venció de nuevo en la cursa popular Sa Llego 2009, una de las grandes clásicas del calendario atlético mallorquín, con casi un minuto de distancia sobre el segundo clasificado en la línea de meta, Guillermo Moreno. En tercera posición compareció Àlex Flórez, a diecisiete segundos de Moreno. La primera fémina entre la extensa nómina de participantes fue Sandra Gabriela, que logró clasificarse en el puesto ochenta, recorriendo los casi ocho kilómetros en los que fija el habitual trazado de la competición poblera (7.870 metros) en poco más de treinta minutos, lo que deja ver el elevado nivel de una carrera imprescindible en estas fechas.
Disfrazado de 'Dimoni' por segundo año consecutivo, Miquel Capó se hizo con el triunfo en la carrera de su pueblo natal, una prueba que comandó de principio a fin imponiendo su fuerte ritmo y la autoridad que le define. La edición de 2009 de sa Llego también ha destacado por el récord de atletas participantes, setecientos treinta llegaron a meta, desbordando las previsiones de la organización, a cargo del área de Esports del Ajuntament de Sa Pobla, con la colaboración inestimable de la Agrupació Atlética Poblera. Todos colaboraron en el éxito de sa Llego, que otro año se superó a sí misma y deja claro que es una de las citas más esperadas por parte de los atletas locales, e incluso algunos llegados de otras localidades y rincones de la Isla, dejando ver la enorme tradición que arrastra la clásica atlética que tiene como marco Sa Pobla.
La carrera en sí se desarrolló en dos partes muy diferenciadas. En la primera, Miquel Capó contó con un grupo de seguidores, con Toumi Dahmani como referencia y al frente, intentando seguir su ritmo, pero a la altura del cementerio municipal, a la entrada de la localidad por la carretera que conduce hacia Pollença, faltando casi unos dos kilómetros para la línea de meta meta, el empuje de Capó, pintado de negro y con cuernos de 'Dimoni', acabó por dinamitar la carrera. El gran favorito para hacerse con la gloria una vez más se marchó en solitario y sin apenas resistencia hasta atravesar en solitario la meta, ubicada en el Museo de Ca'n Planes, donde numerosos poblers y aficionados ovacionaron al héroe local.