Ramón Chamorro/T.J.PEKÍN/PALMA
El porrerenc Joan Llaneras abandonó Pekín como el mejor olímpico español de todos los tiempos y apenas unos días después, otro mallorquín, Xavi Torres lo hará convertido en el mejor paralímpico de la historia, aunque el representante balear comparte dicho honor con la atleta burgalesa Purificación García y la nadadora Teresa Perales. Ya son dieciséis medallas las que adornan las vitrinas del nadador isleño gracias al bronce conseguido en la prueba de 4x50 estilos que se añade a la plata que cosechó en su modalidad predilecta de los 150 metros por estilos.
Xavi Torres logró ayer su segundo metal en el Cubo de la capital china. El integrante del Club Natación Voltor nadó las eliminatorias de la prueba de 4x50 estilos, pero fue el cuarteto formado por Rodríguez, Daniel Vidal, Pablo Cimadevila y Vicente Gil el que permitió a Xavi Torres igualar a Purificación Santamarta. El balear nadó por la mañana y pudo recibir igualmente el bronce conquistado por la tarde por sus compañeros en una genial posta final del estilo libre del 'Chano' finalizando por detrás de China y Brasil.
El deportista palmesano, que tiene en su haber más de cien títulos nacionales y trece medallas en los Campeonatos del Mundo, engordó ayer un palmarés que inauguró en los Juegos de Barcelona en 1992 y que no ha dejado de recibir nuevas preseas en sus cuatro citas paralímpicas siguientes. Cinco oros, cinco platas y seis bronces figuran en la hoja de servicios del mallorquín desde sus primeros éxitos en la ciudad Condal hasta la capital china pasando por Atlanta, Sydney y Atenas. Dieciséis medallas en dieciséis años sin bajarse del podio, aunque todo apunta que Pekín no es el final de su ciclo entre la élite de la natación, puesto que ya advierte que tiene intención de seguir hasta los Juegos de Londres de 2012.
La natación española se erigió como el deporte fetiche de España en los Juegos, convirtiéndose en el más laureado en la capital china y confirmando su lugar entre las potencias mundiales tras superar la treintena de preseas. España se marcha del Cubo de Agua con un total de 31 metales, con diez oros, doce platas y nueve bronces, lo que la dejó situada en el sexto lugar de la clasificación de esta disciplina paralímpica, por delante de un país como Australia.
La delegación nacional, que no falló en ninguno de los nueve días, se acercó a los registros de Atenas (39 con 13 oros), y algo lejos de Barcelona'92 (43 -7-), Atlanta'96 (41 -14-) y Sydney 2000 (46 -22-).