El Atlètic Balears necesitó más de doscientos minutos, contando los dos partidos, para ver puerta ante el Gernika y certificar el regreso a Segunda División B, dieciocho años después. El conjunto blanquiazul empezó el partido muy nervioso pero poco a poco se fue asentando en el terreno de juego y malogró numerosas ocasiones antes de perforar en la segunda parte de la prórroga la portería del equipo vasco en dos ocasiones, con goles de Nando y Ramón, provocando la explosión de júbilo de una afición que respondió a la cita y acudió en masa al Estadi Balear.
El entrenador blanquiazul, Toni Cazorla, apostó por el mismo once que jugó el partido de ida en Urbieta con la novedad de Santos en la punta de ataque junto a Lucas, lo que desplazó a Ramón a la banda izquierda. El hecho de jugar en casa y la necesidad de tener que ir a por la victoria desde el primer minuto, hizo que Cazorla buscará un once más ofensivo, ya que en Gernika apostó por reforzar el centro del campo con la inclusión de Prior.
Por su parte, Javier Luaces, dispuso sobre el terreno de juego un 4-4-2 con las novedades de Torre por Lander y de Dueñas por Suso, ambos en el centro del campo.
El Atlètic Balears intentó llevar la iniciativa en los primeros minutos pero fue un espejismo ya que tras dos lanzamientos desde la esquina sin consecuencias y una falta lateral que Nando remató a la derecha de la portería defendida por Oier, los locales se atenazaron y fueron presa de los nervios, algo que su rival supo utilizar para hacerse con el control del encuentro.
El Gernika se dedicó a parar el partido con repetidas faltas y perdidas de tiempo, tratando de impedir jugar a los locales y dejando que pasaran los minutos. Aunque la primera ocasión clara del partido fue para los vizcainos a los catorce minutos de juego, en un remate de Oxel desde el área pequeña que Cuesta atrapó sin apuros, tras una jugada por la banda izquierda de Etxabe.
El técnico visitante varió el sistema y pasó a un 4-2-3-1 cambiando de banda a los dos extremos, Ibai y Zarandona siendo también para ellos la siguiente acción de peligro, en un remate de cabeza de Iturri tras un centro de Dueñas. Los locales estaban muy nerviosos y totalmente desconocidos, incapaces de desplegar su fútbol. Los blanquinegros se hicieron definitivamente con el mando aunque no crearon excesivo peligro.
Tuvieron que pasar 32 minutos para ver la primera ocasión de peligro de los locales, tras un pase de Javi López a la derecha para la internada de Óscar, que tras recortar al defensa cedió el balón a Ramón, que después de regatear a su marcador disparó duro pero el balón salió junto al poste izquierdo de la meta de Oier. La última ocasión de peligro en los primeros cuarenta y cinco minutos fue para el Gernika, en un remate de cabeza de Etxabe tras un centro de Andueza desde la derecha.
La segunda parte comenzó con un cambio en los locales, Manolo Bueno por Santos, y con polémica, ya que el Gernika reclamó pena máxima en una caída provocada por Etxabe, que buscó el contacto con Cuesta. El colegiado no señaló nada. La siguiente acción también fue muy protestada pero en este caso por los locales, que vieron como el árbitro señaló un fuera de juego muy justo a Lucas cuando se quedaba solo ante Oier.
El Gernika empezó a verse superado por el juego blanquiazul y se vieron los mejores minutos de fútbol de los locales. Una gran jugada por la izquierda entre Pablo y Ramón acabó en un centro de éste último, Rubio dejó pasar el balón pero la defensa deshizo el peligro cuando ya se disponía a rematar Bueno. En la contra, Etxabe trató de sorprender a Cuesta desde lejos pero chutó desviado.
Nando ejecutó una falta cometida en la frontal sobre Bueno pero su disparo se marchó alto. A continuación Cuesta puso el susto en la grada cuando golpeó el balón y éste dio en la espalda de un contrario. Acto después Óscar hizo una pared con Lucas y se plantó sólo ante Oier pero su disparo lo desvió el portero blanquinegro y el posterior remate de Ramón lo sacó un defensa bajo palos cuando ya se cantaba el gol. Ramón de nuevo tuvo otra oportunidad, pero en esta ocasión el balón se marchó por encima del larguero. La última ocasión del partido fue un disparo de Rodri desde más atrás del círculo central que Oier envió a córner con algunos apuros.
En el tiempo suplementario, sólo se vio un equipo sobre el terreno de juego, que perdonó en exceso aunque al final no lo tuvo que lamentar. La primera oportunidad fue un pase largo a la espalda de la defensa pero Ramón, muy activo ayer, disparó cruzado aunque la ocasión más clara de la primera parte fue un balón largo de Rodri, que cabeceó Ramón ante la salida de Oier y que Rubio envió al palo.
En los últimos quince minutos, la primera oportunidad también fue para Rubio, que tras un córner se encontró con el balón pero su disparo salió por encima del travesaño. Isma sacó un córner desde la izquierda y Nando remató al fondo de la portería, desbordando se la alegría entre los aficionados. Un minuto después llegó la rúbrica en una jugada de Fuentes, que cedió el balón en profundidad para la llegada de Óscar, cuyo centro lo remató Ramón de tacón dando en el palo e introduciéndose en la portería a pesar de las enérgicas protestas de los jugadores visitantes. No hubo tiempo para más y afición y jugadores se fundieron en una piña en el centro del campo. La alegría se trasladó luego al vestuario y a la Plaza de España, desde donde la expedición se dirigió bajando la Calle Olmos hasta la fuente situada en Las Ramblas.