Cati Pol (Martí) contra Cati Pol (Borrás). O lo que es lo mismo, Ciutat de Palma Cide contra Ícaro Alaró. El derbi mallorquín de la Liga FEV femenina está servido. Dos concepciones distintas, dos proyectos diametralmente opuestos que chocan mañana sábado a las 19.30 horas en el pabellón del Cide. El sueño del modesto frente a la ambición del gigante. Un partido con muchos matices; un duelo que vale más que una victoria.
Juegan la misma competición, pero Ciutat de Palma e Ícaro tienen poco que ver. El proyecto del Cide está acostumbrado a sobrevivir. A dar pasos muy pequeños. Las de Alaró son una apisonadora. La meta es el ascenso; el objetivo es ganar siempre. La mayor similitud entre los dos equipos es el nombre de las receptoras Cati Pol. La de Consell es uno de los pilares del grupo de Ciutat. Es una pieza clave en el organigrama de las colegiales ya que se encarga de recibir, rematar y mantener la moral de sus compañeras.
La de Alaró representa las raíces del proyecto. Lleva más de una década en el club y a pesar de la llegada de jugadoras muy importantes continúa teniendo protagonismo. Cati Pol Borrás entiende que el Ícaro Alaró no debe confiarse. «Hemos jugado varios partidos durante la pretemporada, pero en competición todo es distinto. Objetivamente nuestro equipo es más fuerte, pero son partidos en los que todas las jugadoras están muy motivadas. No podemos relajarnos ni un momento».